Las autoridades de Honduras han destruido desde 2014 unas 329 pistas clandestinas de despegue y aterrizaje usadas por el narcotráfico, la última una de ellas este mismo miércoles en una zona fronteriza con Nicaragua, informó una fuente oficial.
Los narcotraficantes usaban estas pistas para transportar cocaína y otras drogas a México y Estados Unidos, según la misma fuentes.
La última pista inhabilitada este miércoles estaba en el sector de La Laguna de Punkira, departamento de Gracias a Dios, y hace el número 22 de las detectadas este 2021.
Según un informe de las Fuerzas Armadas de Honduras, fue inhabilitada con explosivos detonados por soldados en el marco de la Operación Morazán II, que dejaron cuatro cráteres de 25 metros de ancho y 15 de profundidad, con un espacio de unos 1,000 metros de largo por 30 de ancho.
La Operación Morazán II busca combatir delitos como el tráfico de drogas, la tenencia de armas de uso prohibido, la asociación ilícita, homicidios y la delincuencia común, entre otros.
El territorio hondureño es uno de los utilizados para el paso de la droga que llega de Suramérica con destino a Estados Unidos.
Las autoridades han decomisado este año más de 13 toneladas de drogas y asegurado más de 40 embarcaciones de pequeño y mediano calado por transportar estupefacientes, según datos oficiales.