Una joven de apenas 19 años de edad fue ultimada a balazos este jueves dentro de su propia casa en la colonia Lomas de las Minitas en Tegucigalpa, Honduras.
La víctima fue identificada como Débora Lizeth Barrientos, quien era madre de una bebé de apenas tres años y vivía con su pareja sentimental, según revelaron sus familiares.
La información preliminar indica que varios sujetos, con armas de grueso calibre, ingresaron a la casa de Barrientos y, al encontrarla dentro, comenzaron a dispararle.
De momento se desconoce el móvil del crimen, pero agentes de la Policía Nacional afirmaron que ya están recolectando indicios para esclarecer el hecho.
Piden justicia
A la escena del crimen se presentaron algunos parientes de la joven hondureña, quienes entre lágrimas clamaron por justicia a las autoridades del país.
Entre la multitud que rodeaba la casa de Débora estaba una de sus tías. Inundada de tristeza dijo que recuerda a su sobrina como una persona alegre y tranquila, de esas que “no se metía con nadie”.
“Mi sobrina era muy bonita, tranquila y trabajadora. Dejó estudiar, pero trabajaba. Ella vivía con su pareja”, declaró entre sollozos la acongojada mujer, que no dio a conocer su identidad.
Pese a los operativos policiales que fueron ejecutados después del sangriento hecho, los responsables del crimen aún continúan prófugos y sin ser identificados.
