El exjefe de las Fuerzas Armadas de Honduras, Romeo Vásquez Velásquez, aseguró que la masacre ocurrida durante la madrugada de este jueves, donde murió su sobrino, “es una acción planificada” y pidió a las autoridades realizar una investigación profunda para esclarecer el hecho.
“Se quieren resultados, si es una acción planificada con más razón deben tomarse las medidas necesarias”, dijo el exgeneral en condición de retiro al llegar a la escena del crimen, donde identificó a su sobrino Luis Zelaya (23) como una de las cuatro víctimas de la masacre en Tegucigalpa.
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Vásquez Velásquez, quien es presidente del Partido Alianza Patriótica Hondureña (APH), lamentó que el actual gobierno, que dirige la presidenta Xiomara Castro, no tenga una plan de seguridad para la ciudadanía. “Le recuerdo al gobierno, tienen que llevar a los jóvenes de los barrios pobres a escuelas técnicas para rescatarlos de las garras de la delincuencia, es una estrategia estructural”, sugirió.
Asimismo, indicó que la violencia en Honduras está afectando a toda la sociedad y que no se trata de estar echándole la culpa a nadie, sino tomar acción para contrarrestar el flagelo. “Se deben tomar medidas para parar la ola de violencia que se está dando en el país”, concluyó el exjefe castrense.
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MADRUGADA SANGRIENTA EN TEGUCIGALPA
En una nueva masacre cuatro personas perdieron la vida violentamente, durante la madrugada de este jueves en el estacionamiento de un centro nocturno de Tegucigalpa, capital de Honduras.
Uno de los fallecidos en el múltiple crimen es un hijo del expresidente hondureño, Porfirio Lobo Sosa (2010-2014), quien fue identificado como Said Lobo Bonilla. El hecho ocurrió a las 2:30 de la madrugada en las inmediaciones del bulevar Morazán, cuando recién habían salido de una discoteca.
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Entre las víctimas también está el sobrino de la esposa del general retirado Romeo Vásquez Velásquez. Asimismo, los otros dos jóvenes asesinados fueron identificados como Salomón Vásquez y Norlan Enrique Rodríguez.
