Las autoridades de la Fuerza de Seguridad Interinstitucional Nacional (Fusina) encabezadas por el presidente Juan Orlando Hernández presentaron ayer el arsenal de alto poder destructivo y los 3.3 millones de lempiras que decomisaron en el centro penal de esta ciudad.
El hallazgo de las armas, granadas, dinero y droga es producto de los registros en los módulos de los reos de las maras 18 y MS que trasladaron a la cárcel de máxima seguridad llamada El Pozo, en Ilama, Santa Bárbara.
Las autoridades de Fusina informaron que los operativos se efectuaron durante tres meses con las herramientas necesarias para investigar, identificar, localizar y excavar en sitios ocultos dentro de los módulos de las dos pandillas. Una parte de las armas fue encontrada en un depósito eléctrico oculto debajo de una plancha de concreto con gatos hidráulicos que abrían y cerraban con control remoto.
| Los fusiles, pistolas, granadas, celulares, droga, municiones y el dinero incautado fueron presentados ayer a los medios de comunicación por las autoridades de Fusina en la Plaza de Héroes de la 105 Brigada de Infantería con la presencia del presidente Juan Orlando Hernández.
|
También incautaron tres fusiles lanzagranadas de 40 milímetros, 26,779 municiones para fusiles y pistolas, 34 granadas entre las cuales hay M64, MK2 y uno de humo M18. Entre lo encontrado en el centro penal también hay 457 cargadores, cuatro cargadores de forma de caracol con capacidad para 100 proyectiles cada uno y que se usan en ametralladoras de alto poder, 18 routers, 161 celulares, 12 chalecos antibalas, 60 pasamontañas, dos kilos de cocaína, 40 libras de marihuana, 766 botellas de bebidas embriagantes y dos balanzas eléctricas.
La presentación la hicieron en la Plaza de Héroes de la 105 Brigada de Infantería, y el primero en hacer uso de la palabra fue el subcomandante regional de Fusina, el coronel Elías Antonio Melgar Urbina, quien dijo que los operativos en el presidio son parte de la operación Morazán y después de tres meses han registrado el 50% de los módulos y edificaciones del reclusorio quedando pendiente de inspeccionar la otra mitad de ese establecimiento penitenciario.
| 34 granadas. En el informe de Fusina se establece que incautaron en el presidio 34 granadas de alto poder destructivo y 161 celulares.
|
Melgar explicó que cada una de las granadas decomisadas tiene un alcance letal de diez metros. Manifestó que con ese arsenal los reclusos podían hacer mucho daño a lo interno del presidio y provocar una fuga masiva que causaría muchos daños a los vecinos de barrios y colonias aledaños al reclusorio.
Con los celulares que hallaron, los pandilleros ayudados de los routers dirigían las extorsiones en la ciudad, por lo que el centro penal era el principal centro de operaciones para la comisión de ese delito. El oficial calificó como todo un éxito la operación Arpía que se llevó a cabo en el centro penal de San Pedro Sula y otras penitenciarías.
| Equipo de comunicación y routers fueron también encontrados.
|
En la cárcel de San Pedro Sula, las autoridades encontraron armas de grueso calibre, celulares, drogas (cocaína y marihuana), bebidas alcohólicas, computadoras y routers, entre otros, que ingresaron con complicidad de las personas que resguardan el recinto. El titular del Ejecutivo aceptó que “hay procesos que no se pueden hacer de tajo por el enorme riesgo que tienen, por eso tenemos que ir progresivamente, y en ese proceso estamos construyendo”.
Prosiguió señalando que lo encontrado en el penal sampedrano no entró así nomás, “eso está claro; por eso, parte de este proceso de inspección ha tenido que ver que los demás operadores de justicia, como el Ministerio Público, hayan conocido toda esta información”.
La construcción de un nuevo sistema carcelario pasa por un monitoreo permanente del nuevo personal de los centros penitenciarios; “eso es un gran desafío que estamos enfrentando todos los días, pero el uso de tecnología ayuda a que se pueda monitorear por qué se dejó abierta una puerta y quién es el responsable”, indicó el titular del Ejecutivo.
“Acabo de dar instrucciones de que esos sistemas tecnológicos que permiten tener acceso a las cámaras en tiempo real estén conectadas a la Dirección Nacional de Inteligencia, al 911”, informó. “Dichos sistemas permiten” -continuó diciendo- “que en el mismo momento en que la cámara perciba la imagen en video esté saliendo a un servidor en el extranjero para que sirva de evidencia, milímetro a milímetro, en términos de tiempo en segundos, en minutos, de qué es lo que está pasando. Esto será un respaldo para los operadores penitenciarios, los operadores de justicia y obviamente para el pueblo en general y que el delincuente sepa que nos estamos dando cuenta qué está pasando”.
En relación con quienes insisten en que se deben cerrar las cárceles conocidas como El Pozo 1 y El Pozo 2 dijo que toda persona puede opinar lo que considere más oportuno.
Indicó que cuando alguien está en política trata de expresar lo que cree es más conveniente, y agregó que “al final le toca al pueblo hondureño escoger qué es lo que cree que es más conveniente”.