San Pedro Sula. La noche del viernes, la élite sampedrana acudió a celebrar la esperada y espectacular boda de Fernando José Faraj Larach y Ana Carolina Prieto.
A las 7:00 pm, cuando una leve llovizna refrescaba la noche, conocidas caras de San Pedro Sula y Tegucigalpa llegaban a la parroquia Nuestra Señora de Suyapa para ser testigos del emotivo acto en que los ahora esposos se juraron amor por siempre.
La atenta mirada de los invitados que colmaron cada rincón de la capilla admiró con solemnidad el paso del enorme cortejo presidido por los padres de los contrayentes: los estimados Carmen y Jorge Faraj y Susana Prieto.
La novia iba del brazo de Carlos Urbizo Solís, quien orgulloso escoltó a la feliz enamorada hasta el altar y en su paso dejó una estela de elegancia con al ajuar saturado de cristales y encaje en una entallada columna sirena complementada con un ramo de frondosos adornos de pedrería.
El padre Enrique Silvestri ofreció un mensaje lleno de júbilo y consejos que los contrayentes escucharon con suma atención y que concluyó con la entrega de arras, alianzas y el tradicional y esperado beso con el que los novios demostraron su amor ante sus seres queridos.
Fiesta memorable
La recepción continuó en el complejo de salones del Centro Social Hondureño Árabe, donde la madre de la novia, la decoradora Susana Prieto, hizo su mejor trabajo y decoró como nunca por ser la boda de su única hija.
Hubo degustaciones gourmet toda la noche. Desde mariscos y carnes rojas hasta ensaladas, antipastos, variedad de asados, comida asiática, mediterránea, árabe e italiana.
El disyoquey Blanco puso a bailar a los más jóvenes con ritmos vanguardistas y, en otro de los salones, el cantante Elmer Duarte y su banda show deleitaron con música en vivo a las parejas hasta las 5:00 am.
El novio escogió un viaje de luna de miel sorpresa para su ahora esposa y ahora mismo están disfrutando de su amor fuera de Honduras durante varias semanas.