04/12/2025
06:45 AM

'La mujer de AL debe creer en sí misma y empoderarse”: Ofelia Santiago López

Honduras, la paridad en las elecciones llega al 8% en las alcaldías y en el Congreso entre 22% y 28%.

San Pedro Sula.

Por casi 20 años Ofelia Santiago López ha impartido conferencias sobre el empoderamiento y liderazgo femenino y estrategia empresarial en Latinoamérica. En esta ocasión visitó San Pedro Sula invitada por la Universidad Tecnológica Centroamericana (Unitec) para hablar sobre cómo las empresas deben transformarse a través del liderazgo y cómo las mujeres deben empoderarse para ser líderes. Ofelia, de nacionalidad española, es parte del consejo asesor de la fundación Woman´s Week. Tiene especialidades en transformación de las organizaciones, estrategia empresarial y política, gestión del capital humano, liderazgo emocional y gestión del talento, liderazgo femenino, entre otras.

¿Cómo ha evolucionado la integración de la mujer en lo político y empresarial?
La toma de decisión es masculina aún, sobre todo en la zona de Latinoamérica y el Caribe, es la zona más atrasada del mundo; algunos países de África y de la antigua Unión Soviética, ahora Europa del Este, tomaron nuevas disposiciones, ahora hay lugares donde casi el 90% de las empresas tienen más de una mujer con posiciones directivas, pero cuando hablamos de Latinoamérica no llegamos ni al 85%, por lo tanto están a la cola del mundo.

¿Cuáles son los retos que deben superar para que no exista esta brecha de género?
El primero es cultural, hay que trabajar la cultura de la empresa, de la región y del país, me refiero a que existen todavía modelos patriarcales donde el rol de jefe se relaciona con un hombre; el segundo es educación, como maestra puedo decir que hay muy pocas mujeres en las áreas de ciencias, matemáticas, tecnología, ingeniería e inteligencia artificial, en esas áreas casi no hay representación de mujeres latinoamericanas y son las áreas que van a definir la transformación tecnológica de las compañías, por lo tanto, si no hay diversidad nos estamos perdiendo el talento de toda la mujer latinoamericana en la toma de decisiones ejecutivas y políticas.

¿Qué se debe hacer para que haya diversidad en las empresas y en la política?
Hay que romper estereotipos, también hay que hacer programas de empoderamiento de mujer a nivel de competencias dirigidas a la gestión y al liderazgo. Me ha llamado la atención que las mujeres de Latinoamérica tienen una falta importante de autonomía, de autoconciencia, de creerse que realmente pueden, es un problema importante la falta de autoliderazgo; muchas mujeres promocionan la cultura machista.

¿Cuál es el papel del Gobierno para que se logre una verdadera equidad de género?
Creyéndonos que debemos tener una sociedad basada en la equidad, es un tema de Estado, hay buenas noticias en Costa Rica, Brasil, Chile, pero en Honduras hay malas noticias, la paridad en las elecciones llega al 8% en las alcaldías, en el Congreso el porcentaje es entre el 22% y 28%, por lo tanto es tema de concienciación nacional y de políticas estatales destinadas al desarrollo y a la igualdad. Se necesitan políticas sociales y estatales urgentes. Cuando adoptamos estas medidas, no solo nos sentimos mejor respecto a la defensa de tener una sociedad mucho más igualitaria, representativa y variable, sino que los rendimientos de las empresas son más sustanciosos.

¿Por qué se mejora la rentabilidad de las empresas cuando hay igualdad de género?
Las empresas deben estar representadas por diversidades, hablo de raza, edades, género, cultura, cuando están representadas en los órganos de decisión, lo que sale de allí es oro bendito, porque las políticas de talento humano son mucho más fáciles, no hay que decirle a nadie que se comprometa con algo que ya está definido. Cuando una mujer está en un perfil directivo de la empresa hay comunicación emocional, competencias basadas en la nutrición para formar a los demás y que formen su talento.

¿Qué deben hacer las mujeres hondureñas para empoderarse?
Tomar conciencia de la importancia de su perfil, están poco empoderadas, que sepan qué sociedad quieren dejarle a sus hijas y que se formen en programas de liderazgo específico de empoderamiento, pero lo más importante es que crean en ellas mismas.