Las calles de San Pedro Sula, La Ceiba, Tegucigalpa y todos los rincones del país amanecieron ayer engalanadas con los desfiles patrios protagonizados por los educandos más pequeñitos del país: los de preescolar.
Desde muy temprano, los niños de prekínder, kínder y preparatoria demostraron que a su corta edad ya saben cómo honrar con orgullo a la patria.
En la capital industrial, los párvulos desfilaron por la primera calle, donde lucieron sus mejores atuendos para enaltecer a Honduras en sus 192 años de emancipación política.
La ternura de los pequeños que integraban los cuadros de palillonas, escoltas de banderas, bandas musicales y otros fue aplaudida por los espectadores, quienes recompensaron su entrega.
Ceibeños ejemplares
En la Novia de Honduras, las actividades patrióticas también comenzaron muy de mañana. Los centros de educación prebásica desfilaron por la avenida San Isidro mostrando sus mejores galas. Niñas y niños ceibeños se robaron los suspiros de los presentes por sus adorables atuendos, de los que presumieron con orgullo.
Aproximadamente 23 escuelas y jardines de niños participaron en las marchas, acompañados por sus padres, el consejo de directores de prebásica, el Cuerpo de Bomberos, Policía de Tránsito y Policía Municipal.
Aracely Martínez, titular de la Dirección Distrital de Educación, manifestó que los estudiantes han mostrado con respeto su dedicación al país y gracias a los valores que han aprendido en sus hogares y en la escuela se han esmerado por dar lo mejor de sí mismos en los desfiles patrios.
Menores entre las edades de cinco y 12 años fueron los protagonistas de los desfiles de ayer, dando un ejemplo de civismo.
