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Faltan terrenos para construir las plantas de tratamiento en San Pedro Sula

  • 01 marzo 2013 /

El atraso en el saneamiento de las aguas negras y residuales provocará que la obra sea impagable para los sampedranos.


La alcaldía ya tiene 35 manzanas de tierra ubicadas al sur de la colonia Villa Olímpica para traspasárselas a Aguas de San Pedro; sin embargo,
faltan 19 manzanas para que puedan empezar la construcción de las tres plantas de tratamiento.

En sesión de corporación, la alcaldía aceptó ayer las 35 manzanas de tierra, como anticipo del 15% del cobro por las 235 manzanas que va a lotificar la Lotificadora de Sula (Losusa) entre el área del estadio Olímpico y Chamelecón. Estas serán exclusivamente para las plantas de tratamiento de las aguas residuales en ese sector.

Según el contrato de concesión, Aguas de San Pedro debe construir tres plantas de tratamiento en los sectores Chamelecón, Rivera Hernández y Cofradía y debió estar en 2006 tratando al menos el 25% de las aguas negras. Pero esto no se ha cumplido por la falta de terrenos para las plantas.

“Ya en la otra sesión voy a llevar las escrituras para firmarlas con el alcalde, solo estoy esperando que me manden el punto de acta”, dijo Ronald Yuja, gerente general de Losusa.

Wilfredo Flores, regidor y miembro de la unidad de concesiones de la Municipalidad, dijo que gracias a la recesión de las 35 manzanas de tierra, la alcaldía solo tendría que comprar las 19 manzanas restantes, para poder hacer la entrega de las 54 manzanas que necesita la concesionaria para empezar a construir las tres plantas de tratamiento.

El regidor informó que la alcaldía tiene unos 28 millones de lempiras para la compra de los terrenos que hacen falta, además de otros ingresos que podrían ayudar a recaudar los 45 millones de lempiras que demanda la compra de los terrenos en total.

Flores reiteró su preocupación porque debido a que no se cumplieron los tiempos que establece el contrato con Aguas de San Pedro ahora el proyecto se ha vuelto impagable para los sampedranos. El desarrollo de todas las obras tiene un costo aproximado de 180 millones de dólares y a la
concesionaria solo le quedan 18 de los 30 años que contempla el contrato de concesión. Una vez las plantas de tratamiento estén operando, la empresa debe recuperar su inversión.

Marisa Mena, directora municipal de Concesiones, indicó que actualmente están a la espera de hacer sus recomendaciones a la Corporación Municipal, porque Aguas de San Pedro ya presentó el plan de saneamiento.

Mena señaló que un estudio realizado por un consultor internacional arrojó que no es viable cobrar el proyecto vía tarifa, ya que sería un porcentaje muy alto para los ciudadanos. También lamenta que el proyecto se haya retrasado por mucho tiempo.

“Todo está listo. Solo estoy a la espera que la corporación compre los terrenos para dárselos a Aguas de San Pedro”.

Detalló que desde hace dos años las aguas deberían de estar siendo tratadas en un 60%, según una nueva reprogramación.

Mauricio Chiovelli, gerente general de Aguas de San Pedro, quien estuvo presente ayer en la sesión, lamentó que la alcaldía solo tenga una parte de los terrenos que se necesitan para construir.
“Dicen que ya tienen unos terrenos en la Rivera Hernández, a nosotros no nos han dado nada”.

Chiovelli opinó que es necesaria la intervención del Estado central y pedir ayudas internacionales, para que el alto costo de la obra no se vea reflejado en la factura de los abonados.

Contaminación

La ambientalista Diana Bentancur enfatizó la importancia de las plantas de tratamiento, ya que es un proyecto de saneamiento de los afluentes que más están contaminando a San Pedro Sula los cuales son los ríos Ulúa y Chamelecón.

“En marzo de 1994, cuando la población era la mitad de lo que es ahora, el río Chamelecón era una cloaca abierta, ahora es peor”. Bentancur manifestó que de continuar sin las plantas de tratamiento se podría desatar una epidemia. La especialista asegura que al tratar las aguas crudas se recuperará la flora y fauna. “El río Chamelecón podríamos utilizarlo para riego y para la acuicultura”.