Para tener mejores empresas y más calidad de vida para todos sus asociados, hay una serie de medidas que se pueden implementar. No todas aplican de la misma forma, ya que el tamaño y giro son variables, pero la experiencia propia en todos estos temas y la observación nos indican que son muy eficientes en lograr los resultados de responsabilidad social y solidaridad.
Tener un servicio médico es bueno por múltiples razones. Las personas en edad laboral generalmente son reacias a llevar un control de salud, y esto permite crearles una ficha médica con su historial de salud (que se llevan al salir de la empresa) y un programa de revisión periódico. Se puede dar consulta por las diferentes molestias e incidentes que puedan tener, dentro del trabajo o afuera.
Esta atención siempre puede ser complementada por el IHSS u otro seguro, pero la experiencia nos indica que en la mayoría de los casos rutinarios se puede resolver de una forma más ágil y eficiente. En caso de organizaciones más pequeñas, se puede tener convenio con una clínica cercana para llevar este trabajo. Generalmente se pueden conseguir condiciones mucho más favorables que la consulta horaria normal.
Existe una obligación de dar una subvención para niños en edad escolar, pero adicionalmente la compra y entrega de paquetes de útiles escolares de parte de la empresa asegura que llegue el recurso directamente a los niños que lo necesitan. Esto abarca también a nivel preescolar, donde acceso a materiales educativos hace una diferencia importante.
Estas son medidas tienen un impacto considerable en la calidad de vida de quienes entregan su esfuerzo a la actividad productiva de las empresas. Están basadas en la participación voluntaria, creando un ambiente más comprometido y productivo.
