Herman Cain suspendió ayer su campaña por la candidatura presidencial republicana para evitar que siga la cobertura de la prensa sobre las denuncias de conducta sexual inapropiada, alegando que son falsas, pero que han dañado a su familia.
“Suspendo mi campaña presidencial debido a las distracciones continuas y el dolor continuo causados a mí y a mi familia”, dijo Cain ante varios cientos de partidarios congregados en lo que debía ser la inauguración de su cuartel nacional de campaña.
Cain hizo el anuncio cinco días después que una mujer de la zona de Atlanta -Ginger White, de 46 años de edad- aseguró que mantuvo relaciones extramaritales con el ahora ex aspirante durante 13 años. Previamente, otras mujeres habían acusado de acoso sexual al empresario de Georgia. Cain ha negado haber tenido tal aventura. “Debido a estas acusaciones falsas y no probadas mi familia ha pagado un precio muy doloroso”, dijo Cain, acompañado de su esposa, Gloria, parada detrás de él en el estrado.
Postura
“Mi esposa, mi familia y yo sabemos que esas acusaciones falsas y no probadas no son verdad. Así que una de las primeras declaraciones que quiero hacer hoy es que estoy en paz con Dios, estoy en paz con mi esposa y ella está en paz conmigo”, agregó.
Cain, quien nunca ha ocupado cargos de elección popular, llegó a ser el favorito inesperado en la volátil carrera republicana hace apenas unas semanas. Cain disfrutó de un fuerte apoyo del movimiento conservador Tea Party, que lo veía como una alternativa al exgobernador de Massachusetts, Mitt Romney. Sin embargo, una vez en el centro de la atención nacional, Cain tuvo tropiezos en la definición de su temario político, haciendo que algunos se preguntaran si estaba listo para la presidencia.
Luego se reveló a finales de octubre que la Asociación Nacional de Restaurantes había llegado a arreglos de pagos con dos mujeres que declararon que Cain las acosó sexualmente cuando él era presidente de la organización. AP