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Devaluación generará más crisis para los venezolanos

  • 10 enero 2010 /

La devaluación del bolívar y el cambio dual de la moneda venezolana anunciados por Chávez generarán mayores ingresos para el Estado, pero más inflación y crisis para los ciudadanos.

La devaluación del bolívar y el cambio dual de la moneda venezolana anunciados por el presidente Hugo Chávez generarán mayores ingresos para el Estado, pero más inflación y crisis para los ciudadanos, en opinión de diversos expertos y políticos.

Economistas y dirigentes opositores coincidieron ayer en afirmar que la medida, anunciada el viernes por el gobernante venezolano, permitirá al Ejecutivo recabar más dinero en un año electoral, con legislativas convocadas en septiembre; pero perjudicará gravemente a los ciudadanos al crear más inflación.

Análisis
Según el experto Orlando Ochoa, “los precios van a subir, pero el Gobierno necesita más ingresos y recibirá el doble por sus exportaciones”.

En declaraciones a medios locales, el experto consideró que se trata de un sistema de cambio que privilegia al sector público.

“El Estado importa a 2.6 bolívares y recibe 4.3 bolívares por cada dólar de sus exportaciones”, dijo.

Al anunciar el viernes la devaluación de la moneda, hasta ahora en 2.15 bolívares por dólar, Chávez indicó que se establecían dos tipos de cambio: uno de 2.60 bolívares y otro de 4.30, siempre en el marco del control estatal de divisas, vigente desde 2003.

La cotización de 2.60 bolívares regirá las importaciones prioritarias, entre ellas las del sector de los alimentos, la salud, el de maquinarias y equipos, ciencia y tecnología y todas las importaciones del sector público, así como remesas familiares o recursos de consulados y embajadas acreditadas en Venezuela.

Para el resto, se utilizará una paridad de 4.30 bolívares por dólar, que llamó “dólar petrolero”, y que especialmente permitirá cubrir los requerimientos del sector automotor, del comercio y de las telecomunicaciones.

Sector privado
El director ejecutivo de la Cámara de Comercio, Industria y Servicio de Caracas, Víctor Maldonado, dijo ayer que las medidas, que mañana entrarán en vigencia, no son más que una devaluación adornada con un conjunto de promesas.

En declaraciones recogidas por la emisora Unión Radio, Maldonado destacó que “el dólar diplomático, que es el que se reserva el Gobierno para sus propios negocios y rangos esenciales como alimentos y medicinas, supone un 21% de devaluación y el dólar petrolero un 100% de devaluación”.

“En promedio, sacando las correcciones que tienen que ver por el peso de cada uno de los sectores afectados, tenemos un 76% de impacto mínimo global en este momento, o sea nuestra moneda se devaluó en un 76%”, manifestó.

En su opinión, el sistema de cambio está “institucionalmente corrompido no sólo por aquellas razones que se puedan imaginar del funcionario que pide comisión, sino corrompida porque no sirve a los efectos que el Gobierno se planteó de mantener los precios bajos, una dinámica de importaciones controlada”.

Otros responsables económicos, como el presidente de la Asociación Venezolana de Agencias de Viajes y Turismo, Avavit, Fernando La Riva, solicitaron aclaraciones al Gobierno con respecto al cambio dual que estableció sin ofrecer todos los detalles, y el alcance en los diversos sectores no citados hasta ahora.

Indicó que, por ejemplo, los boletos (billetes) aéreos no son cosas de primera necesidad y se preguntó si en su caso se iba a aplicar el cambio a precio de “dólar petrolero”.

“Solicitamos aclarar cuál de los tipos de cambio va a aplicarse a la venta de boletos aéreos”, dijo en una entrevista a Unión Radio.

Las críticas y advertencias de los expertos y representantes del sector económico venezolano se han sumando a las primeras reacciones de rechazo de los dirigentes políticos opositores a las medidas del Gobierno.

Tanto el partido Primera Justicia, como Un Nuevo Tiempo, al igual que el alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, criticaron la devaluación y todos consideraron que va a suponer una mayor inflación en un país que cerró 2009 con un índice de 25.1%, uno de los más elevados del mundo.