El huracán Florence que bajó a categoría 3 se debilitó en las últimas horas al bajar sus vientos máximos sostenidos a 125 millas por hora (205 km/h) en su avance hacia Las Carolinas, en la costa sureste de EEUU, adonde llegará el viernes.
Cabe destacar que la alerta ya no sólo es para las Carolinas; los estados de Maryland, Virginia y Georgia están en emergencia por el 'extremadamente peligroso' huracán.
Más allá de las Carolinas y Virginia, la amenaza de inundaciones en el interior se extenderá hasta la próxima semana a algunas zonas de Tennessee, Georgia, Virginia Occidental, Ohio, Pensilvania, Maryland y el Distrito de Columbia, donde se encuentra la capital, Washington.
Se prevé que Florence se desvíe este domingo hacia el sur en dirección a Georgia, que hoy se sumó a las declaratorias de emergencia en previsión de las fuertes lluvias y marejadas esperadas.
Maryland y el Distrito de Columbia, declararon el estado de emergencia en las últimas horas.
Según datos de Cancillería, más de 110 mil hondureños residen en los estados de Carolina del Sur, Carolina del Norte y Georgia.
Los hondureños residentes en Virginia y Washington D.C. pueden llamar a la línea de emergencia (770) 645-8881.
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No obstante, las dimensiones de Florence 'han aumentado' y mantiene su potencial de 'marejadas ciclónicas y lluvias que ponen en peligro la vida humana' en amplias zonas de la costa sureste estadounidense.
Florence, una tormenta poderosa y peligrosa, descrita como la más grande en golpear esta parte de la costa Este de Estados Unidos en décadas, podría tocar tierra en las Carolinas la noche del jueves con una furia devastadora.
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Los meteorólogos advirtieron que aún se espera que Florence sea un 'huracán mayor extremadamente peligroso' cuando se detenga a finales de esta semana cerca de la costa de Carolina del Norte para luego girar a la izquierda.
Desde la Casa Blanca, el presidente Donald Trump instó a obedecer las órdenes de evacuación, insistiendo en que 'si se les pide que se vayan, salgan'.
'Esta será una tormenta mucho mayor de lo que hemos visto en décadas', dijo Trump, destacando la preparación del gobierno. 'No ahorramos ningún gasto', dijo.
'El desastre está a la vuelta de la esquina y está llegando', dijo el gobernador de Carolina del Norte, Roy Cooper.
