05/12/2025
08:46 AM

Uso inadecuado de las redes sociales impulsa extorsiones

San Pedro Sula, Honduras.

Aunque la zona norte es una de las más afectadas con la extorsión, la poca actitud de la denuncia limita a las instituciones de seguridad para contrarrestar este delito.

Así lo indicaron expertos durante la primera convención regional de seguridad Prevención Científica de la Extorsión Empresarial organizada por la Cámara de Comercio Hondureño Americana (AmCham).

El evento de dos días, que finalizó ayer, dejó amplios conocimientos a los representantes de más de 40 empresas participantes, sobre el accionar del crimen organizado, la naturaleza de sus acciones y cómo deben reaccionar ante este flagelo.

Guillermo Reyes, presidente del comité de seguridad de AmCham, manifestó que la extorsión es un problema serio al que debe dársele la importancia que tiene, ya que debido a este muchas empresas están teniendo pérdidas que ponen en riesgo las inversiones existentes y futuras.

“Guatemala ya está llevando a la práctica el método de la prevención”, especificó.

El comisionado de policía Quintín Juárez compartió que en la zona norte específicamente en San Pedro Sula hay menos actitud de la denuncia que en otras partes del país. Enfatizó en que hay muchas personas que ponen denuncias falsas. “Muchos hacen estas denuncias falsas para desviar la atención de otros delitos que se están cometiendo”, señaló.

Juárez detalló que en la Capital Industrial la extorsión es controlada por dos conocidas pandillas y un grupo criminal.

El teniente coronel Amílcar Hernández, director general de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA), declaró que la primera acción de una persona que está siendo víctima de extorsión debe ser la denuncia a la línea confidencial 143 en la que un agente le da los lineamientos que debe seguir en función de su caso.

Añadió que el 40% de los dos mil casos judicializados por extorsión corresponden a San Pedro Sula. “A esos tipos nunca se les va a satisfacer las necesidades, lo mejor es denunciar y simular una negociación de tres a cuatro días mientras se investiga el caso”.

Hernández destacó que en muchos casos la persona estaba siendo extorsionada por algún familiar, conocido o vecino que se apoyan de lo que saben del individuo, sobre todo a través de las redes sociales. “Una de las recomendaciones que hacemos es que no den tanta información de su vida personal o de su rutina en redes sociales, eso los hace presa fácil”.

Agregó que muchas personas ponen su ubicación y hasta parte de su rutina diaria en las redes.