25/04/2024
05:59 AM

'Tengo el corazón deshecho, me arrebataron a Berta”: madre

La Esperanza, Intibucá, Honduras.

Ya pasó una semana desde el asesinato de la ambientalista Berta Cáceres y a la fecha no hay ninguna persona acusada por el crimen, solo tres presuntos testigos que han dado su versión sobre los acontecimientos ocurridos el 3 de marzo.

El caso se maneja bajo secretismo; sin embargo, agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) ya están indagando por su propia cuenta para esclarecer el crimen que causó repudio nacional e internacional.

Aún con el dolor a flor de piel, Austra Berta Flores, madre de la lideresa indígena, recuerda que su hija le hizo una última promesa que no le pudo cumplir: que pronto volvería a la casa.

“Tengo el corazón deshecho. Ha sido un golpe duro el que nos han dado a la familia y las organizaciones de Honduras y el mundo. Estamos destrozados, Berta dio la lucha y me la arrebataron”, expresó.

Todavía recuerda la última plática con su hija. Todo está tan fresco en su mente que jamás va a olvidar cada cosa que le dijo.

Cuenta que el miércoles 2 de marzo su hija estuvo con ella hasta las 11:00 pm, hora en que decidió irse a su casa en El Líbano junto con el mexicano Gustavo Castro, quien ese día impartió un seminario sobre energía hídrica.

“La vi la noche que la asesinaron. Ella estuvo aquí con el compañero de México, con Gustavo, que ha sido compañero de años de grandes luchas.

Foto: La Prensa

Personal del Alto Comisionado de Naciones Unidades se encuentra en La Esperanza acompañando las investigaciones que también realiza el FBI.
Es un sociólogo, un hombre muy comprometido, y estuvieron como hasta las 11:00 de la noche. Estuvimos platicando. Me habló de los planes que tenía para seguir en la lucha”, expresó la madre.

Una llamada a las 4:00 am de esa fatídica madrugada del 3 de marzo la sobresaltó: fue Carlos H. Reyes (dirigente sindical) el que le informó de la muerte de su hija.

“Yo creo que a Berta ya la estaban esperando. Fue una noticia terrible, y yo me desvanecí”, expresó Austra.

Las recientes declaraciones de José Dore Cáceres, padre de Berta, no inmutan a Austra Flores, una reconocida lideresa política intibucana.

Ella asegura que con su esfuerzo educó a la ambientalista desde que se separó de su esposo, cuando Berta apenas tenía tres años.

“No vale la pena determinar esas declaraciones; mis hijos yo los crie. Cuando nos separamos, Berta Isabel tenía tres años, así que ella es hechura y figura mía. Eso sí, ella quería mucho al papá”.

Austra ahora busca tomar fuerzas y está clara en que no desmayará y continuará con el sueño de su hija.

“No voy a dar el gusto de que me vean caer. Ella fue valiente, y yo, pese a que tengo mi alma deshecha, seguiré la lucha con la misma valentía que Berta le imprimió”, dijo.

El tiempo apenas le alcanza a la madre de Berta, pues comisiones, autoridades y personas llegan constantemente a visitarla.

“Berta Cáceres es una heroína de este país. Pido a las autoridades que capturen a los autores intelectuales del asesinato de mi hija”, clamó.

Funcionarios de la ONU. Desde las 8:00 am, los enviados del Alto Comisionado de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llegaron a la sede de la jefatura policial en La Esperanza, Intibucá.

Durante 30 minutos, los delegados internacionales dialogaron con los agentes policiales e investigadores para conocer los avances de la investigación en el asesinato de la ambientalista.

Foto: La Prensa

La casa de Berta Cáceres es custodiada.
Tras concluir con ellos, la delegación se trasladó hasta la sede del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (Copinh), donde fueron recibidos por los directivos de la organización, a los que escucharon por más de una hora.

La delegación se encuentra en el municipio desde el martes y ha visitado, además, a las jueces que conocen el expediente investigativo en el caso, así como a la familia de Berta Cáceres.

Los funcionarios de la ONU continúan en la zona conociendo a profundidad los elementos que hasta ahora han recopilado las autoridades. LA PRENSA intentó obtener reacciones por su visita, pero uno de los delegados expuso que será hasta el final del proceso que se van a pronunciar.

Agentes del FBI

El lunes, los agentes del Buró Federal de Investigaciones (FBI) llegaron hasta la vivienda de Berta Cáceres ubicada en la residencial El Líbano acompañados por investigadores hondureños.

Ahí permanecieron por más de una hora inspeccionando la vivienda, haciendo preguntas a los agentes y valorando las acciones con el fin de obtener el mayor número de evidencias captadas por los hondureños.

Pero el FBI también ha hecho visitas a actores claves en la investigación, entre ellos a la madre de Berta Cáceres.

Los agentes siguen en la zona acompañando el proceso junto con los cinco equipos que desde el día del hecho están empeñados en resolver el crimen.

Se informó que tanto los celulares del vigilante de la residencial El Líbano como el de Tomás Gómez y Aureliano Molina fueron requisados por la Fiscalía y son parte de las evidencias que se analizan para ver si hay conexión o no con el caso.

Se informó que el recurso de reposición propuesto por el Ministerio Público fue aceptado por la jueza que conoce el caso y se espera que derivado de esos nuevos elementos puedan girarse las primeras acciones contra posibles involucrados en el hecho.

En Tegucigalpa, los hijos de Berta Cáceres junto con dirigentes del Copinh y Óscar Castro, hermano del mexicano Gustavo Castro, quien figura como testigo del crimen, ofrecieron una conferencia de prensa para exigir que se esclarezca el crimen de la lideresa.

Demandaron la firma de un convenio entre el Estado de Honduras y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que una comisión de expertos independientes y de confianza del Copinh participe en la investigación que actualmente realiza el Ministerio Público.