San Pedro Sula, Honduras.
Después de 18 meses de los asesinatos de Marlene Banegas, coordinadora de la Fiscalía de Delitos contra la Vida y de la abogada Olga Eufragio, de la Fiscalía del Ambiente, las investigaciones están basadas en hipótesis, de las cuales solo existen informes de investigación, pero que no identifican a los responsables con nombres y apellidos.
Según fuentes que participaron en la investigación, las hipótesis que se manejan es que el ataque iba dirigido en contra de la fiscal Marlene Banegas, pues estaba a punto de acusar a policías que habían participado en la masacre de ocho personas ocurrida en las cercanías de la morgue de Medicina Forense.
La fiscal Marlene Banegas conducía la noche del 10 de octubre de 2014 un vehículo 3.0 gris, sin placas que tenía asignado y viajaba junto con su compañera y amiga la abogada Olga Eufragio. Las fiscales fueron sorprendidas por sicarios que se bajaron de un vehículo, el cual atravesaron para parar la marcha del carro en el que iban y comenzaron a dispararles.
Eran vigiladas
Las abogadas fueron vigiladas desde días antes de los crímenes y el día que se ejecutó la acción criminal fueron seguidas desde que salieron de trabajar del edificio Ana Rojas ubicado en el barrio Río de Piedras, 20 avenida 3 calle donde están ubicadas varias fiscalías entre ellas la de Delitos contra la Vida.
Banegas salió a las 4:55 pm en el vehículo doble cabina y junto con Olga Eufragio se fueron a un café ubicado en la avenida Circunvalación, donde estaban siendo vigiladas desde un vehículo turismo que quedó grabado en videos de seguridad.
A las 7:02 minutos, las féminas salieron del café y se dirigieron por la circunvalación de norte a sur pasando por la Fuente Luminosa y el Monumento a la Madre donde eran seguidas por tres vehículos.
A media cuadra, antes de llegar al semáforo de la 7 avenida en la colonia El Prado, un vehículo turismo se les atravesó mientras otros dos carros, entre ellos, una camioneta estaban a un lado y atrás viendo el ataque. Del turismo se bajaron supuestamente dos hombres y uno de ellos comenzó a disparar en múltiples ocasiones contra la fiscal Banegas, quien quedó muerta en el asiento del conductor y su amiga Olga Eufragio en el asiento del pasajero.
Por el accionar que tuvieron los sicarios y que fue analizado por los investigadores, el crimen fue cometido por supuestos policías, pero con los videos recopilados a lo largo del recorrido y las pesquisas que realizaron hasta el momento, no han logrado hacer ninguna acusación.
Caso engavetado
Otra de las hipótesis dadas públicamente por el exdirector de la Policía Nacional, Ramón Sabillón, es que a las fiscales las asesinaron un grupo de miembros de la pandilla 18 del sector de Chamelecón.
En ese momento, la Policía realizó múltiples operativos y señalaron a varios supuestos pandilleros que fueron presentados ante los medios de comunicación, pero ninguno fue acusado por el Ministerio Público.
Pese a que las máximas autoridades aseguraron que los crímenes de las fiscales serían resueltos, no hay ningún expediente judicializado, todo ha quedado en informes en los que no señalan a ningún sospechoso de los crímenes.
La suposición más fuerte de que el atentado iba dirigido contra Marlene Banegas, porque haría una acusación contra supuestos policías quedó archivada por las autoridades del Ministerio Público y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) que han mantenido el caso parado, pues desde octubre de 2014 no volvieron a realizar ninguna diligencia para formalizar acusaciones.
Después de 18 meses de los asesinatos de Marlene Banegas, coordinadora de la Fiscalía de Delitos contra la Vida y de la abogada Olga Eufragio, de la Fiscalía del Ambiente, las investigaciones están basadas en hipótesis, de las cuales solo existen informes de investigación, pero que no identifican a los responsables con nombres y apellidos.
Según fuentes que participaron en la investigación, las hipótesis que se manejan es que el ataque iba dirigido en contra de la fiscal Marlene Banegas, pues estaba a punto de acusar a policías que habían participado en la masacre de ocho personas ocurrida en las cercanías de la morgue de Medicina Forense.
La fiscal Marlene Banegas conducía la noche del 10 de octubre de 2014 un vehículo 3.0 gris, sin placas que tenía asignado y viajaba junto con su compañera y amiga la abogada Olga Eufragio. Las fiscales fueron sorprendidas por sicarios que se bajaron de un vehículo, el cual atravesaron para parar la marcha del carro en el que iban y comenzaron a dispararles.
 Los sicarios que planearon el ataque contra ellas iban en tres carros y dos de los sujetos se bajaron de un turismo. Uno disparó contra la fiscal Marlene Banegas, quien tenía 50 heridas en su cuerpo.
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Las abogadas fueron vigiladas desde días antes de los crímenes y el día que se ejecutó la acción criminal fueron seguidas desde que salieron de trabajar del edificio Ana Rojas ubicado en el barrio Río de Piedras, 20 avenida 3 calle donde están ubicadas varias fiscalías entre ellas la de Delitos contra la Vida.
Banegas salió a las 4:55 pm en el vehículo doble cabina y junto con Olga Eufragio se fueron a un café ubicado en la avenida Circunvalación, donde estaban siendo vigiladas desde un vehículo turismo que quedó grabado en videos de seguridad.
A las 7:02 minutos, las féminas salieron del café y se dirigieron por la circunvalación de norte a sur pasando por la Fuente Luminosa y el Monumento a la Madre donde eran seguidas por tres vehículos.
A media cuadra, antes de llegar al semáforo de la 7 avenida en la colonia El Prado, un vehículo turismo se les atravesó mientras otros dos carros, entre ellos, una camioneta estaban a un lado y atrás viendo el ataque. Del turismo se bajaron supuestamente dos hombres y uno de ellos comenzó a disparar en múltiples ocasiones contra la fiscal Banegas, quien quedó muerta en el asiento del conductor y su amiga Olga Eufragio en el asiento del pasajero.
Por el accionar que tuvieron los sicarios y que fue analizado por los investigadores, el crimen fue cometido por supuestos policías, pero con los videos recopilados a lo largo del recorrido y las pesquisas que realizaron hasta el momento, no han logrado hacer ninguna acusación.
Caso engavetado
Otra de las hipótesis dadas públicamente por el exdirector de la Policía Nacional, Ramón Sabillón, es que a las fiscales las asesinaron un grupo de miembros de la pandilla 18 del sector de Chamelecón.
En ese momento, la Policía realizó múltiples operativos y señalaron a varios supuestos pandilleros que fueron presentados ante los medios de comunicación, pero ninguno fue acusado por el Ministerio Público.
Pese a que las máximas autoridades aseguraron que los crímenes de las fiscales serían resueltos, no hay ningún expediente judicializado, todo ha quedado en informes en los que no señalan a ningún sospechoso de los crímenes.
La suposición más fuerte de que el atentado iba dirigido contra Marlene Banegas, porque haría una acusación contra supuestos policías quedó archivada por las autoridades del Ministerio Público y la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) que han mantenido el caso parado, pues desde octubre de 2014 no volvieron a realizar ninguna diligencia para formalizar acusaciones.
