San Pedro Sula, Honduras
“Este año vamos a vivir una
Semana Santa muy particular, será un tiempo de verdadero recogimiento espiritual, ya que estaremos en nuestros hogares”, dijo el padre Fredy Valdivieso, párroco de la iglesia San Pedro y San Pablo y responsable de la liturgia diocesana.
Ante la preocupación que invade al pueblo hondureño por causa del coronavirus, el sacerdote aconseja aprovechar este momento para alimentar la fe por medio de la lectura de la Biblia y la oración.
“En la iglesia primitiva, los fieles se reunían en las casas, celebraban las eucaristías en los hogares. Estamos llamados a renovar esta experiencia en la que los padres eran los primeros educadores espirituales de los hijos”.
La Semana Santa se inicia mañana domingo 5 de abril en medio de la emergencia mundial que se vive con el COVID-19, una enfermedad que ha arrebatado la vida de miles de personas.
También conocida como la Semana Mayor, inicia el Domingo de Ramos y finaliza con el Domingo de Pascua. Se trata de la última semana del Señor Jesús en la tierra. Durante este tiempo, el pueblo católico conmemora con fervor el sacrificio de Jesús en la cruz, quien entregó su cuerpo para que todos pudiesen obtener la salvación.
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Juvenil de Ramos. Hoy a través de Facebook Live de 3:30 pm a 4:00 pm en la página pjarquidiocesanahn, y por Suyapa TV de 4:00 pm a 6:00 pm.
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“Este es un tiempo para meditar sobre los misterios de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesús”.
“No nos podemos dejar agobiar por el temor, El Señor es fiel y estará con nosotros todos los días, debemos confiar en su palabra y en sus promesas. Él dio su vida por nosotros, no nos va a abandonar”, exhortó.
Para el padre Henry Asterio, responsable de la Pastoral Vocacional de la Diócesis de San Pedro Sula, esta Semana Santa será la del “corazón y la familia”.
“Antes las familias se iban de vacaciones en la Semana Mayor, ahora nos estamos viendo obligados a reconocer lo verdaderamente esencial que es celebrar nuestra fe en estos días santos”. Por último, la Conferencia Episcopal de Honduras invita a los hondureños a “dar testimonio del valor de la solidaridad y el amor cristiano hacia los más necesitados”.
