El cardenal hondureño, Óscar Andrés Rodríguez Maradiaga, se refirió nuevamente a la persecución de la que es objeto la Iglesia en Nicaragua por parte del Gobierno que dirige el cuestionado presidente Daniel Ortega.
“Preocupa el sufrimiento de los hermanos de Nicaragua, ciertamente, el poder emborracha y, el poder absoluto, corrompe. Ahora la reacción de los que quedan afuera es refrescar la memoria de los que nos gobiernan”, cuestionó el líder de la Iglesia Católica en Honduras.
Rodríguez Maradiaga agregó que “es fácil que se quemen otros, pero es injusto porque no saben que se están haciendo esfuerzos porque no solo se trata de un obispo, hay más sacerdotes que están siendo perseguidos y están en peligro”.
El arzobispo de Tegucigalpa también criticó a aquellas personas que “dicen llamarse católicos y toman posición en un gobierno, cuando en un Congreso Nacional se tratan de presentar leyes que van contra los valores éticos y morales, ¿Dónde están esos grandes católicos que se llaman al silencio?”.
“La Iglesia no juzga, pero toca apoyar a través del diálogo y no con confrontación para buscar la paz y la justicia. Nuestro camino es la oración y el diálogo, tomar conciencia de donde poder poner la confianza”, reflexionó durante la homilía dominical desde la Basílica de Suyapa.
Finalmente manifestó que la sensatez del Santo Padre es buscar el diálogo porque también hay católicos que están en peligro.
