Con manos hacia el cielo y de rodillas sobre el puente del canal Maya de La Lima, Cortés, un grupo de hondureños oró y entonó canciones a Dios ante la inminente llegada de Julia, una tormenta tropical que tocará tierra como huracán de categoría 1.
“Con estas tormentas hay muchas pérdidas, Padre, pero nosotros confiamos en ti. Señor, detén esas aguas, en el nombre de Jesús, tu nombre tiene poder, Señor”, se le escucha decir a una mujer.
El evento se produjo exactamente en la calle que de la residencial Oro Verde conduce hacia la carretera CA-13. Hombres, mujeres, jóvenes y niños conformaron la cadena de oración por Honduras.
Las imágenes circularon ayer, viernes, en las redes sociales, y muestran cómo varias personas arrodilladas, y con biblias en mano, clamaban a Dios para que desvíe la tormenta o que no permita que haga estragos en el suelo hondureño.
“Te pido la paz para mi ciudad, te pido perdón por mi país (...) ¿A quién iré, Señor, sino a ti”, era la canción que entonaban otros pobladores, mientras el cielo se tornaba gris y una ligera llovizna caía sobre el municipio.
La Lima fue una de las ciudades más golpeados por los huracanes Eta e Iota y sus habitantes temen que una situación similar pueda ocurrir con la llegada de Julia.
De acuerdo con la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco), la tormenta tropical puede provocar inundaciones, deslizamientos, derrumbes, caídas de árboles, entre otros daños, mientras que el país todavía no presenta un plan de emergencia.
