TEGUCIGALPA. Como un plan para blindar al oficialismo en la “impunidad” calificó el diputado del Partido Salvador de Honduras (PSH), Luis Redondo, la polémica elección de la junta directiva provisional del Congreso.
El parlamentario aseguró, además, que no le sorprende la reacción de los legisladores, pero sí le sorprende cómo “(el presidente) Juan Orlando Hernández metió mano con Leonel Ayala”.
Para Redondo, la elección de Jorge Cálix para presidir la junta provisional del Poder Legislativo derivó luego que Ayala, secretario de Gobernación, Justicia y Descentralización, negara la palabra al diputado de Libertad y Refundación (Libre), Rasel Tomé, quien llevaba la propuesta de la moción para proponerlo a él y a los demás representantes ungidos por la presidenta electa, Xiomara Castro de Zelaya.
Pese a ello, Redondo dijo que mañana “vamos a nombrar la junta directiva permanente del Congreso Nacional, que represente al pueblo y no a estructuras criminales, ni al crimen organizado, ni a la narcodictadura”.
En respuesta, Ayala aseguró que cumplieron con su responsabilidad. “Hemos dejado ya instalada la directiva provisional. Honduras necesita armonía. El partido que ha ganado las elecciones tiene que dialogar a lo interno”.
Más reacciones
El dirigente de Libre Gilberto Ríos declaró a la agencia AFP que detrás de los diputados están “el crimen organizado, el poder financiero, el narcotráfico y los equipos que saquean los recursos del Estado”, que quieren frenar los proyectos de Castro de Zelaya contra la corrupción y la impunidad.
Para el secretario saliente del CN, Tomás Zambrano, tanto Jorge Cálix como Luis Redondo son idóneos para ocupar la presidencia del Legislativo. “He sido compañero de ellos ocho años, he trabajado en comisiones con los dos, hemos debatido en el pleno, a veces criticándonos y otras apoyando alguna iniciativa. Ambos tienen experiencia legislativa”.
