Debido a que todos los sistemas de agua potable de colonias, aldeas y caseríos fueron destruidos por las tormentas Eta y Iota, las autoridades municipales con apoyo de empresas y otras organizaciones han invertido más de 500,000 lempiras en los trabajos de reparación en 12 comunidades.
En el sector de la colonia Planeta repararon el sistema de agua, que ya tenía casi un mes de haberse dañado, debido a que la bomba colapsó, y también cambiaron gran parte de la tubería.
Edgardo Bonilla, gerente de Aguas de La Lima, manifestó que la bomba se dañó por el uso, ya que solo en esa colonia le suministran el servicio de agua a más de 2,000 familias, por lo que tuvieron que comprar una nueva bomba y en el proyecto invirtieron 160,000 lempiras.
Por casi un mes, los pobladores eran abastecidos de agua por pipas que llevaban los bomberos y otras cisternas privadas.
El funcionario explicó que en todo el municipio el agua es por medio de pozos, los cuales tienen que estar en constantemente mantenimiento de bombas y tuberías. Otro proyecto de agua que recién terminaron fue en la colonia San Cristóbal, ya que el motor de la bomba también se había quemado.
Bonilla detalló que el 100% de toda el agua que consumen en La Lima es por medio de bombeo en pozos, los cuales tienen bombas y motores sumergibles con sus paneles, tuberías y cableados, que con el uso presentan algún tipo de fallas, por lo que tienen que estar en constante mantenimiento.
Los sistemas de agua en cada comunidad tienen un costo superior a los 100,000 lempiras, entre más grande sea la bomba el valor aumenta.
La pobladora Yadira Cruz agradeció que en colonia Planeta terminaran de reparar el sistema de agua, y dice que la bomba sufrió severos daños a causa de las inundaciones.
Algunos sectores del municipio como la Villa y Guaruma 1 todavía están recibiendo agua por medio de pipas, pero el alcalde Santiago Motiño les ha prometido a los pobladores que no les faltará el agua y personal municipal revisará los sistemas para que el vital líquido les llegue a sus viviendas.
