Tras que se hiciera pública la cifra de la recompensa que se ofrece por información que lleve a la captura del general en retiro de las Fuerzas Armadas de Honduras, Romeo Vásquez, el canal HCH divulgó un video en el que Romeo Vásquez increpa los hechos suscitados en torno a su caso.
"Honduras, escúchenme, no me voy a rendir. Esto no es justicia, es venganza política. Quieren hacer de mí un trofeo. Un castigo para que nadie se atreva a enfrentarlos. Quieren infundir miedo. Quieren callarlos", dijo Romeo Vásquez, quien en el video sostiene su discurso con vehemencia.
También agregó: "Mientras destruyen el país y pactan con el narcotráfico están protegidos. Los que servimos con honor somos perseguidos y lo sabemos bien. En estas condiciones la cárcel no es justicia, es una sentencia de muerte, allí estaré indefenso, y todos sabemos quienes manejan el crimen dentro de los centros penales. Me han amenazado de muerte a mí y a mi familia. Nos son palabras al aire. El régimen asesorado por cubanos y venezolanos quiere encarcelar a la oposición y silenciar la verdad. Si hoy me persiguen a mí, mañana puedes ser tú. No dejaré solos a mis compañeros, los otros dos generales acusados injustamente. No permitamos que nos callen. Sigamos de pie por la justicia, por la libertad y por Honduras. Me quieren encarcelar y me quieren asesinar sólo por defender mi patria, sólo por defender la libertad de todos los hondureños. Qué Dios bendiga a Honduras", concluyó Romeo Vásquez.
Después de la reunión del Consejo de Ministros en Olancho este domingo, el ministro de Seguridad, Gustavo Sánchez, mencionó que hay una recompensa de un millón de lempiras para la persona que proporcione información de Romeo Vásquez.
“El general en condición de retiro, Romeo Vásquez, es oficialmente prófugo de la justicia hondureña. Hay una recompensa de él y de los nueve más buscados. Hay un dato que se omite. La recompensa para la persona que brinde información para la captura de Romeo Vásquez es de un millón de lempiras”, dijo Gustavo Sánchez durante la conferencia.
Romeo Vásquez era el jefe del Estado Mayor Conjunto de las Fuerzas Armadas cuando el 28 de junio de 2009, el entonces presidente de Honduras, Manuel Zelaya, fue derrocado y expulsado del país.
El 5 de julio de ese mismo año, Zelaya intentó ingresar por vía aérea al país, y durante una nutrida manifestación de hondureños que se aprestaban a recibirlo en el Aeropuerto Toncontín, en Tegucigalpa, se produjo la muerte del joven Isis Obed Murillo, al parecer alcanzado por la bala de un fusil que le impactó en la cabeza.
Por la muerte de Murillo, el Ministerio Público (Fiscalía) acusó a Vázquez y otros dos generales retirados, Venancio Cervantes y Carlos Roberto Puerto.
Los tres militares retirados enfrentan un juicio por "homicidio" y "homicidio en su grado de ejecución de tentativa a Alex Roberto Zavala", ambos seguidores de Zelaya, el esposo y asesor principal de la presidenta de Honduras, Xiomara Castro.
Los acusados fueron capturados el pasado 5 de enero y remitidos a la Penitenciaría Nacional, cercana a Tegucigalpa, pero una semana después la medida les fue revocada y se les dictó arresto domiciliario.