San Pedro Sula, Honduras
Los miembros de la Fundación Obras Sociales Vicentinas, Osovi, entregaron en la noche del sábado el Premio Quetglas 2020, que reconoce a hondureños que hacen más llevadera la vida de los menos favorecidos con sus actos de amor, caridad y esperanza.
En vivo: Siga la entrega del Premio Quetglas 2020.
El presidente de la junta Directiva de Osovi, el padre José Vicente Nacher, resaltó que 'hay jóvenes hondureños que no solo esperan un futuro mejor sino que trabajan por él' y que 'los galardonados con el premio representan muy bien los valores de Osovi'.
'Al mostrar a estas personas ejemplares, que son unos verdaderos héroes; tampoco queremos olvidar nuestra mirada atenta y vigilante contra los desalmados, que también los hay, y que en medio de tanto sufrimiento siguen tomando lo que no es suyo'.
'Necesitamos, y mucho de la ayuda exterior, pero nada se va a resolver sin el trabajo interior. Preparamos un futuro que incluya a todos con equidad y honestidad, especialmente para quienes han perdido sus casas en las últimas semanas'.
Para la edición 2020 que fue realizada de manera virtual, por primera vez en los siete años de historia del evento, hubo un total de 26 nominados de todo el país.
Además se entregó un premio póstumo a aquellos héroes que estuvieron luchando durante la pandemia, entre ellos María Guadalupe Sánchez Aguilar de Abufele, por medio de la Asociación Cepudo, y al doctor Luis Antonio Enamorado.
Los reconocimientos fueron entregados por el presidente de la junta Directiva de Osovi, el padre José Vicente Nacher, y los miembros de la directiva Giselle de Canahuati y el ingeniero Juan Carlos Sabillón.
Con un video también se rindió homenaje a los héroes que trabajaron ayudando a los hondureños durante las tragedias de los huracanes Eta y Iota.
Tambien se entregó un reconocimiento especial a la Asociación Cepudo, por el apoyo a las madres solteras y viudas. Cepudo recibió una placa de reconocimiento por su 'operación ética y transparente', así como un importante apoyo económico.
'La pandemia por el covid nos obliga a tomar medidas por la enfermedad, pero la pandemia no impide nuestra relación contigo', dijo monseñor Ángel Garachana quien recordó la obra del padre Antonio Quetglas 'quien pasó por la vida haciendo el bien, siguiendo el ejemplo de Jesús y de San Vicente de Paúl'.
'Este tiempo es un tiempo de oportunidades, especialmente para el amor al prójimo, del comportamiento samaritano y por esto recordamos a estos samaritanos en tiempo de pandemia, a quienes han dado signos de amor efectivo y afectivo. El amor social es más fuerte que la pandemia', destacó.
El presidente ejecutivo del Banco Centroamericano de Integración Económica, Dante Mossi, orador invitado especial de la gala, destacó que 'debemos ser solidarios siempre que se pueda, para ayudar a aquellos que no tienen esperanza'.
'No puedo pensar en una mejor manera de ayudar que no sea por estas causas que cambian vidas', destacó al recordar su vinculación a la Fundación Osovi y su experiencia de con la obra del padre Quetglas, apoyada por el BCIE.
'En el BCIE queremos ser esperanza para los que no tienen condiciones de calidad de vida y que nuestra contribución esté al servicio de aquellos que más lo necesitan'.
Desde el 14 de octubre estuvieron abiertas las inscripciones para que los hondureños nominaran a quienes se destacaron a lo largo del año por el servicio a los demás.
Por séptimo año consecutivo, la fundación Osovi reconoció a personas que desde el anonimato son una mano de ayuda desinteresada para los más desprotegidos.
El galardón cuenta con el patrocinio oficial de Grupo Financiero Ficohsa y el auspicio de diario LA PRENSA, El Heraldo, Televicentro, Emisoras Unidas, Elcatex, Claro y Emsula.
Además de la entrega del galardón, se realizaron diversas presentaciones artísticas.
