El caracol, un manjar marino que deleita el paladar, está incluido en la lista de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES).
Esta convención tiene como objetivo garantizar que el comercio internacional de especímenes de animales y plantas silvestres no ponga en peligro la supervivencia de las especies.
Los empresarios de la pesca deberán regirse por las medidas de gestión y manejo estipuladas en el Plan de Manejo de Pesquería de Caracol Gigante del Caribe de Honduras (PMP) a través del equipo implementador.
El pasado 1 de agosto se abrió la veda de pesca de caracol, la cual vence el último día del mes de febrero de 2025.
La talla mínima promedio de captura de caracol será de 21.0 centímetros de longitud de concha, medida desde el canal sifonal hasta el ápice y con el labio de la concha de al menos de 12 milímetros de grueso.
La pesca de caracol juvenil queda prohibida, debido a que, al hacerlo, se pone en riesgo la recuperación y sostenibilidad de la población de caracol gigante.
El peso mínimo de carne en flete será de 4.16 onzas de peso 100% limpio procesado en las plantas, como un indicador estadístico.
El peso se verificará mediante inspección del proceso administrativo, regulatorio e investigativo con la finalidad de verificar el cumplimiento de las medidas de gestión y manejo estipuladas en el PMP de caracol gigante y acuerdo ministerial número 117-2024 de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG).
14 embarcaciones pescarán caracol gigante
Cada embarcación tiene derecho a una cuota de pesca de 71,051.015 libras durante la temporada y tiene un máximo de 5 viajes para cumplir esa cuota. La cuota asignada para el país, es de 360 toneladas métricas.
En caso de no cumplir con la cuota de captura y vencido el plazo otorgado para efectuarla, los remanentes de la cuota otorgada pendientes de captura no podrán ser asignados a temporadas pesqueras siguientes.
En la temporada 2024-2025, se certificaron y registraron 14 embarcaciones para la pesca de caracol gigante. De estas solo una pertenece a La Ceiba, en su mayoría están en Roatán y el resto en Guanaja, en el departamento de Islas de la Bahía.
En la regional de la Dirección General de Pesca y Acuicultura (Digepesca) de La Ceiba, Atlántida, el personal recibe el producto extraído de los bancos de pesca por los empresarios de la pesca, para determinar si el caracol reúne los requisitos anteriores.
José Ángel Gonzales, director de Digepesca, explica el proceso que se sigue desde que el caracol es desembarcado en los laboratorios hasta que es empacado para su exportación o para suplir el mercado nacional.
“Cada embarcación debe traer las muestras para determinar la cantidad que trae, aquí se sabe si es hembra o macho, ya que normalmente no se ve al momento de la captura. Se toman las medidas para saber el largo y el ancho del caracol, luego se extrae el animal de adentro de la concha para iniciar con el proceso de limpieza”, manifestó Gonzales.
Cada saco con caracol viene acompañado de un manifiesto adentro de una botella para evitar que el cartón con la información del producto se moje.
El formulario tiene un encabezado con la temporada de pesca, que en esta ocasión es 2024-2025, nombre de la embarcación, fecha que se extrajo la muestra, número de viaje, el banco de pesca, la latitud donde fue pescado, la longitud y la profundidad.
“El caracol viene sucio, como tal, se pesa, se toman las medidas de la concha, de la boca, lo ancho, lo largo y el grosor del labio. Se va pesando a medida se va limpiando”, puntualizó Gonzales.
Los bancos de pesca industrial mayormente están en La Mosquitia hondureña, y sus nombres son Rosalinda, Oneida Middle Bank, Thunder Knoll, Banco Gorda (Este, Oeste). Asimismo, Banco Misteriosa y El Rosario.
Cabe destacar que el área de Cayo Gorda, es una zona prohibida para la pesca con el fin de asegurar el éxito reproductivo de las poblaciones de caracol y para las especies que están incluidas dentro del acuerdo de veda número 067-2024.
Exportación de caracol
La cuota comercial de exportación del caracol gigante es de 388.51 toneladas métricas, equivalente a 856,516.91 libras de flete 100% limpio. La cuota comercial de exportación será distribuida entre las 14 embarcaciones participantes, asignándoles una cuota comercial de exportación por embarcación de 61,179.77 libras, equivalente a 27,750.96 kilogramos.
La cuota comercial nacional es por un valor de 63.50 toneladas métricas de caracol gigante, equivalente a 140,000 libras.
La cuota para el mercado nacional será distribuida entre las 14 embarcaciones participantes, asignándoles 10,000 libras por embarcación. Debiendo obligatoriamente dejar como mínimo 2,000 libras por embarcación, en cada uno de sus viajes.
