26/04/2024
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Honduras: La castración a violadores puede ser física o química

  • 02 octubre 2015 /

Un diputado introducirá a la cámara un proyecto de ley orientado a castrar a violadores

Tegucigalpa, Honduras

Reducir más del 90% de la testosterona en el hombre es lo que se busca a la hora de realizar una castración. Esa fue la explicación científica proporcionada ayer por Denis Chirinos, jefe del Servicio de Urología del Hospital Escuela.

La reacción se debe a que el diputado de Libre, Luis Cruz, dijo que tiene listo un proyecto para que autoricen la castración física y química contra aquellos violadores en serie a quienes se les haya comprobado el delito.

Explicó el congresista por Cortés que está cansado de tanta violación contra niños y niñas inocentes que quedan marcados para toda la vida.

Al proyecto solo le faltan algunos detalles para someterlo a consideración de sus compañeros de cámara.

Mientras, el doctor Chirinos explicó que existen dos maneras de realizar este procedimiento: una física o quirúrgica y una química.

“Cuando la hacemos quirúrgica lo que se hace es quitarle los testículos a los pacientes, donde a través de eso se disminuye el 95 por ciento de la testosterona que se produce”, explicó Chirinos.

Detalló que la castración vía químicos se hace administrando medicamentos que hacen efecto en el cerebro.
“El efecto se da en el hipotálamo, donde se produce la liberación de hormonas que estimulan la producción de testosterona”, manifestó.

La persona a la cual se le bloquea esta hormona inicialmente va a presentar una serie de síntomas, según el galeno. Entre esos signos se encuentran la irritabilidad, insomnio, debilidad emocional, además de los famosos bochornos o cuadros de calor imprevistos.

Pero el más dramático es que el hombre que sea castrado perderá completamente el apetito sexual.
“Por ejemplo, cuando le da la menopausia a la mujer, en el hombre es como una andropausia, no hay erecciones, su pene quedará inerte, va a ver a la mujer pero ni deseos le va a dar”.

Tiempo de tratamiento

El experto detalló que estos medicamentos se aplican cada tres meses, es decir que no es una consecuencia de por vida.

Una vez aplicado, tarda un promedio de tres semanas para que su apetito disminuya con la primera dosis.

“Con el medicamento lo que pasa es que si se quiere que el paciente vuelva a tener libido y vuelva a tener erecciones, se le suspende el medicamento”, apuntó. De ser así, a partir de que se le suspenden los fármacos, la persona vuelve a la normalidad en un período de seis a ocho semanas.

“Con la quirúrgica ya no hay manera de volver a ponerle los testículos al paciente, en la otras sí se puede suspender el tratamiento”, detalló.

Si el Congreso llegase a aprobar la propuesta serían al menos 1,000 dólares por dosis lo que se debería invertir.

En la actualidad, esta práctica se realiza dentro de la Medicina extrayendo uno o los dos testículos cuando hay un cáncer testicular, o ante traumatismos o infarto de esos órganos.

También se realiza cuando existe el cáncer de próstata para reducirlo. Asimismo se realiza en los transexuales masculinos que lo hacen para cambiar de sexo.