Daniel Sibrián Bueso, fiscal general adjunto presentó este viernes su carta de renuncia ante el Congreso Nacional para que sea aprobada mediante una votación como la ley manda.
La renuncia de Sibrian Bueso coincide con la crisis en Honduras en donde aún no se define a su sustituto y al del fiscal general Óscar Chinchilla.
En la carta de Sibrian se puede leer que el funcionario denuncia las amenazas que ha recibido por parte de “un grupo de diputados y miembros del partido Libertad y refundación”.
Recuerda que en cumplimiento de lo establecido por los artículos 233, 320, 321, de la Constitución de la República y 80 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional, que establece que “los funcionarios que elige el Congreso Nacional de la República, cuando concluya el período para el que fueron electos y no se hayan designado sus sustitutos permanecerán en funciones en sus cargos hasta que se realice dicha elección”, por lo que deberá permanecer en su cargo conforme a la ley.
“No obstante lo anterior, un grupo de diputados del Congreso pertenecientes al partido Libre, desconociendo la literalidad de su propia Ley Orgánica, que ya han reconocido como válida en el Congreso, al menos en 2 ocasiones, para otros altos funcionarios del Estado, como ser quienes integraron las Cortes Supremas de Justicia que vacaban de sus cargos en las elecciones de los años 2016 y 2023 (pues éstos no fueron acusados por permanecer en sus cargos); en esta fecha me han acusado injustamente por razones eminentemente políticas, de incurrir en delito en caso de permanecer en el cargo, como manda la Ley. Y por ende, desconociendo la legalidad que ha amparado a otros altos funcionarios, en similares eventualidades”, denuncia.
“En tal virtud, y de estimar el pleno del Congreso Nacional de la República, que es válida su denuncia e inaplicable la legalidad del artículo 80 de la Ley Orgánica del Congreso Nacional, estaré retirándome por esa sola razón, del cumplimiento de mi deber ciudadano, rogándoles de ser tal el caso, aceptar esta carta de renuncia condicionada, previa votación que deba darse en el pleno de ese hemiciclo, aprobando o improbando la misma”, destaca.
Sibrián asegura que de quedar evidencia de la improcedencia de la acusación presentada, “estaré solicitando las correspondientes garantías para poder asumir en forma pacífica mi deber ciudadano, como alto funcionario en proceso de vacancia del cargo público al que fui electo”.
“Finalmente, deseo manifestar que en lo particular las imputaciones efectuadas, son injustas, tendenciosas, y lo más grave, ponen en peligro la seguridad e integridad de mi familia y la propia”.
De acuerdo con el fiscal, los argumentos presentados por el titular del Congreso, Luis Redondo, incitan el odio entre los grupos de apoyo del partido Libre, “lo cual es sumamente grave, pues provienen de un grupo parlamentario.
