Tegucigalpa, Honduras.
La idea de seguir endeudando a Honduras con agentes extranjeros sigue presente en el Gobierno.
Autoridades de la Secretaría de Finanzas comenzaron a conversar con ejecutivos de dos bancos del exterior respecto a la colocación de un bono soberano por $1,000 millones en el transcurso del próximo año para conseguir recursos frescos.
En su regreso al país, tras conversar con organismos internacionales de financiamiento, Wilfredo Cerrato, titular de Finanzas, dijo que exploran las condiciones para que en un futuro se emita un bono soberano por dicho monto.
El funcionario prefirió obviar el nombre de las instituciones bancarias porque están en el proceso de integrar en este proyecto a otros bancos para analizar de una manera comparativa cuál será la mejor oferta, indicó el funcionario.
“De manera inicial estamos hablando de $1,000 millones, pero estamos completando un estudio que nos indique cuál será el valor correcto”, refirió.
Anteriormente, Marlon Tábora, presidente del Banco Central de Honduras (BCH), manifestó a un grupo de empresarios exportadores que se descartaba la emisión de este título valor para el presente año, pero que se analizaba para el próximo.
Práctica obligada
Economistas y miembros de la academia coincidieron en que el creciente déficit y una recaudación fiscal insuficiente para cubrir el gasto corriente obligan al Gobierno a recurrir a la contratación de más endeudamiento externo vía emisión de bono soberano.
Por su parte, Cerrato explicó que los dos títulos emitidos por un monto total de $1,000 millones el año anterior tenían en este momento un excelente comportamiento en el mercado secundario. Además, que los recursos obtenidos por esta nueva colocación se utilizarían para el pago de la deuda pública que tiene condiciones de corto plazo y altas tasas de interés.
José Luis Moncada, expresidente de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), en una reunión efectuada en el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), resaltó que el problema persistente del gobierno es que los ingresos corrientes vía cobro de impuestos son inferiores al gasto público.
“La colocación del referido bono soberano no es urgente, pero sí es necesaria. Es de recordar que cerramos el cuarto trimestre del año con un déficit muy alto, porque se reportaron ingresos corrientes por L14 mil millones y gasto por L18 mil millones”. Es decir, se mejoró la recaudación pero faltó una mejor administración del gasto, lo que llama a las autoridades financieras del país a realizar un profundo análisis al respecto.
El déficit fiscal aprobado por el Congreso Nacional para este año fue de 4.7% del producto interno bruto (PIB).
El BCH en su Programa Monetario 2014-2015, publicado de manera reciente, indica que será de 5.2 y la calificadora de riesgo Moody’s estima que será de 6.4. Cada punto representa un estimado de L4 mil millones .
Por su parte, Hugo Noé Pino, expresidente del BCH y economista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), manifestó su preocupación por ese posible endeudamiento, sobre todo cuando los funcionarios del Gobierno recién han conversado con personeros de diferentes organismos internacionales.
Se mostró escéptico en que esos recursos se utilizarán para sustituir deuda cara por barata, porque en la reconversión se debe tener en cuenta el impacto que tendrá la depreciación anual del tipo de cambio y los costos financieros en que incurre el BCH. También el riesgo de enfrentar un shock externo que imposibilite generar los suficientes dólares para pagar los compromisos.
La idea de seguir endeudando a Honduras con agentes extranjeros sigue presente en el Gobierno.
Autoridades de la Secretaría de Finanzas comenzaron a conversar con ejecutivos de dos bancos del exterior respecto a la colocación de un bono soberano por $1,000 millones en el transcurso del próximo año para conseguir recursos frescos.
En su regreso al país, tras conversar con organismos internacionales de financiamiento, Wilfredo Cerrato, titular de Finanzas, dijo que exploran las condiciones para que en un futuro se emita un bono soberano por dicho monto.
El funcionario prefirió obviar el nombre de las instituciones bancarias porque están en el proceso de integrar en este proyecto a otros bancos para analizar de una manera comparativa cuál será la mejor oferta, indicó el funcionario.
“De manera inicial estamos hablando de $1,000 millones, pero estamos completando un estudio que nos indique cuál será el valor correcto”, refirió.
Anteriormente, Marlon Tábora, presidente del Banco Central de Honduras (BCH), manifestó a un grupo de empresarios exportadores que se descartaba la emisión de este título valor para el presente año, pero que se analizaba para el próximo.
Práctica obligada
Economistas y miembros de la academia coincidieron en que el creciente déficit y una recaudación fiscal insuficiente para cubrir el gasto corriente obligan al Gobierno a recurrir a la contratación de más endeudamiento externo vía emisión de bono soberano.
Por su parte, Cerrato explicó que los dos títulos emitidos por un monto total de $1,000 millones el año anterior tenían en este momento un excelente comportamiento en el mercado secundario. Además, que los recursos obtenidos por esta nueva colocación se utilizarían para el pago de la deuda pública que tiene condiciones de corto plazo y altas tasas de interés.
José Luis Moncada, expresidente de la Comisión Nacional de Bancos y Seguros (CNBS), en una reunión efectuada en el Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep), resaltó que el problema persistente del gobierno es que los ingresos corrientes vía cobro de impuestos son inferiores al gasto público.
“La colocación del referido bono soberano no es urgente, pero sí es necesaria. Es de recordar que cerramos el cuarto trimestre del año con un déficit muy alto, porque se reportaron ingresos corrientes por L14 mil millones y gasto por L18 mil millones”. Es decir, se mejoró la recaudación pero faltó una mejor administración del gasto, lo que llama a las autoridades financieras del país a realizar un profundo análisis al respecto.
El déficit fiscal aprobado por el Congreso Nacional para este año fue de 4.7% del producto interno bruto (PIB).
El BCH en su Programa Monetario 2014-2015, publicado de manera reciente, indica que será de 5.2 y la calificadora de riesgo Moody’s estima que será de 6.4. Cada punto representa un estimado de L4 mil millones .
Por su parte, Hugo Noé Pino, expresidente del BCH y economista del Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), manifestó su preocupación por ese posible endeudamiento, sobre todo cuando los funcionarios del Gobierno recién han conversado con personeros de diferentes organismos internacionales.
Se mostró escéptico en que esos recursos se utilizarán para sustituir deuda cara por barata, porque en la reconversión se debe tener en cuenta el impacto que tendrá la depreciación anual del tipo de cambio y los costos financieros en que incurre el BCH. También el riesgo de enfrentar un shock externo que imposibilite generar los suficientes dólares para pagar los compromisos.