La belleza natural de esa biosfera da un encanto especial a la zona, pero la espontaneidad de sus pobladores atrae los corazones de todos los que la visitan.
En las comunidades miskitas y pech de Belén Culuco, Kury, Cocovilla y Nueva Jerusalén, los anfitriones de la gira compartieron con el equipo de LA PRENSA sus costumbres, secretos y leyendas de estas etnias que mantienen vigentes sus enlaces con la selva.
Las casas están entre los árboles y los aldeanos han mantenido un vínculo permanente con la naturaleza, a tal grado que en lugar de dañarla la complementan.
Son cinco etnias que conviven con la belleza exuberante en la Biósfera: garífunas, misquitos, pech, ladinos y sumos o tawahkas. Ellos cultivan maíz, frijoles, yuca y viven de la caza, pesca, del consumo de plantas, las que también utilizan como medicinas.
Pasan olvidados, han aprendido a sobrevivir. La lejanía de las ciudades importantes, falta de accesos, educación y salud limita sus actividades, pero son unidos. Los alcaldes amortiguan las necesidades de los pobladores y “hacen milagros” para responder a las demandas de sus pueblos.
Claman por ayuda, piden al Gobierno que no los abandone, que no los olvide. Están en zonas adonde sólo por la vía aérea o marítima se puede ingresar. Viven en la región más bella de Honduras, pero están en el olvido.
Apenas el apoyo de algunos organismos no gubernamentales les hace paliar un poco sus necesidades de atención; pero hay mucho por resolver en estas tierras.
Giran órdenes de captura
La serie de investigación publicada esta semana en diario LA PRENSA sigue acelerando las decisiones que están tomando las autoridades del Gobierno y que a todas luces se dan en respuesta al clamor de la población nativa de la mayor reserva natural del país que se cansó de ver su degradación.
Tras las denuncias de depredación y usurpación en la Biosfera del Río Plátano, la Fiscalía del Ambiente liberó ayer 27 requerimientos fiscales con el mismo número de órdenes de captura contra los culpables de la devastación en la zona protegida y Patrimonio de la Humanidad declarada por la Unesco.
La fiscal del Ambiente, Reina Pineda, declaró ayer en las instalaciones de la Fiscalía General de la República, que ya se presentaron 27 requerimientos fiscales, los que fueron enviados a su dependencia por el Instituto de Conservación Forestal, ICF.
“Los 27 requerimientos fueron trabajados por fiscales. Ellos fueron enviados a Puerto Lempira, Gracias a Dios, aprovechando que iban a un juicio. Los requerimientos fueron ya admitidos por un juez y las órdenes de captura también ya fueron giradas. Quiero explicar que en estos momentos estamos esperando copias de cierta documentación para hacer efectivas estas órdenes. Ya el viceministro de Seguridad, Armando Calidonio, nos asignó unos agentes de la DNIC para ejecutar las capturas”, explicó Pineda.
Al consultarle contra quienes son los requerimientos fiscales, Pineda manifestó que no se pueden dar los nombres de los presuntos responsables de la devastación en la Biosfera del Río Plátano porque al hacerlo se estaría alertando a las personas.
“Lo que sí puedo decir es que los requerimientos son por los delitos de daños y usurpación. Esto viene desde que llegaron los de la Unesco a hacer el informe del Río Plátano, de nuestra Biosfera. Estos delitos se han cometido en la zona de amortiguamiento, adonde realmente han talado bosques en zonas vírgenes y han ocupado los terrenos para parte de ganado”, agregó la fiscal.
Por tales delitos es que la Fiscalía del Ambiente liberó las 27 órdenes de captura y dejó claro que no son los misquitos los que están haciendo los abusos en la zona. “No porque sea en la Mosquitia significa que ellos son los responsables de los delitos, por lo general son las personas de Colón, Olancho y de lugares aledaños a la Biosfera. También quiero destacar que las denuncias son desde hace cinco o quizás seis años atrás que ejecutó el ICF, pero no traían referencias, ni fotos de GPS ni testigos; de esa manera no podíamos presentar requerimientos”, argumentó la fiscal.
Ejecución inmediata
Después de reconocer que las denuncias de devastación en la Biosfera son desde hace cinco o seis años, la fiscal Pineda aseguró que ahora los 27 requerimientos liberados ayer sí cuentan con todos los puntos necesarios y es por eso que se presentaron.
“Las capturas se pueden hacer en las próximas horas o quizás en dos o tres días si nos giran de inmediato las copias que nos faltan. El personal del coronel Marco Antonio Leiva, director de protección del bosque de las Fuerzas Armadas, ya está trabajando y también tenemos a los agentes de la DNIC”, puntualizó la fiscal del Ambiente.
Asunto se ha vuelto peligroso
El Procurador General del Ambiente, Gilberto Ochoa, admitió que pese a que se trabaja para combatir el delito en la Biosfera del Río Plátano, es muy poco lo que se hace, más ahora que está de por medio la acción del narcotráfico.
Dejó claro que la tarea debe ser luchar para conservar este patrimonio de la humanidad; pero como lo declaró el ministro de Recursos Naturales y Ambiente, Serna, Rigoberto Cuéllar hace falta una coordinación de esfuerzos entre diferentes instituciones públicas, sumado al requerimiento del apoyo internacional.
El funcionario dijo a LA PRENSA que debido a la infiltración del crimen organizado, particularmente el narcotráfico, en la Biosfera ahora resulta muy peligroso hasta dar declaraciones respecto al problema, y están en peligro hasta los mismos procuradores que hacen las investigaciones de campo.
Para luchar contra el narcotráfico de la zona, señaló que el Poder Legislativo aprobó una figura importante para combatir este tipo de ilícitos con la creación de los jueces de jurisdicción nacional.
Pero pese a algunas actuaciones de la Procuraduría, contra los invasores, el funcionario reconoció que el problema va más allá de eso, es cuestión social vinculada a la criminalidad.
