Los estudiantes de la jornada nocturna del Intae aseguran que no se moverán del instituto tras conocerse la decisión de la Departamental de cerrar su modalidad por escasa matrícula.
Para los alumnos, con esa medida están cortándoles el derecho a la educación que tienen aquellas personas que trabajan durante el día.
Unos 50 estudiantes llegaron ayer a las instalaciones del centro educativo con pancartas y algunos padres de familia para expresar públicamente su malestar.
“No nos vamos a mover de lugar. No podemos dejar de recibir clases en el Intae porque es nuestra única alternativa para estudiar al salir del trabajo. Nos están haciendo un gran daño”, dijo Indira Martínez, presidenta de los estudiantes de dicha jornada.
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“¿Por qué no nos dijeron del cierre de la jornada de la noche al inicio del año? Ahora no sé cómo matricular a mi hijo en otro colegio si yo prefería la noche porque yo trabajo y ocupo a mi hijo en la casa”, dijo Nohemí Lara, madre de familia.
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Los protestantes hicieron énfasis en que el factor seguridad no ha sido impedimento para que ellos asistan a clases, pues aseguran que hay presencia policial durante las noches.
Tras manifestarse afuera de la institución los jóvenes salieron rumbo a la Fiscalía para presentar un recurso de amparo para que se cancele la decisión oficializada ayer en San Pedro Sula.
Desde el primero de marzo la jornada nocturna dejará de funcionar, indicaron las autoridades departamentales de Educación.
“Es parte de un proceso de reubicación para que la falta de maestros se solvente en el departamento. Hay profesores que están bien cómodos solo con unos cuantos estudiantes en el aula y otros que ni siquiera llegan a clases. Las decisiones se toman y no podemos hacer otra cosa ya”, indicó Sara Doris Sambulá, de la departamental de Educación.
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