24/04/2024
04:25 PM

“El Chapo” sería llamado para aclarar si envió un millón de dólares a Juan Orlando Hernández

Los abogados del expresidente hondureño aseguraron que el narco mexicano no testimoniará en su contra.

Nueva York, Estados Unidos.

Estados Unidos acusó al expresidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, de operar este país como un “narcoestado” y de usar sobornos que recibió de narcotraficantes como “El Chapo” Guzmán para cometer fraude electoral en las dos elecciones a las que concurrió.

Fiscales estadounidenses han asegurado tener pruebas de que el expresidente hondureño Juan Orlando Hernández recibió más de un millón de dólares del narco mexicano Joaquín “El Chapo” Guzmán.

Hernández Alvarado siempre ha negado las distintas acusaciones, asegurando que las alegaciones provenientes de narcotraficantes confesos, en las que se basa el grueso de la información recopilada por las autoridades estadounidenses, no son creíbles.

En los últimos días trascendió que precisamente Joaquín Guzmán sería uno de los testigos en el futuro juicio que le espera a Juan Orlando Hernández; sin embargo, su equipo de abogados ha argumentado que este no declararía en contra del exgobernante, sino más bien aclararía a quién le brindó el dinero y si fue verdad que mandó dicha cantidad a Juan Orlando Hernández.

El exalcalde de El Paraíso, Copán, Alexander Ardón, declaró en 2019 durante el juicio de Juan Antonio Hernández, hermano del expresidente, que Guzmán Loera pagó un millón de dólares para financiar la campaña política del exmandatario para las elecciones generales de 2017, a través de su hermano “Tony Hernández”, a cambio de protección para narcotraficantes.

Juzgado en Estados Unidos

Unas horas después, el 21 de abril, de que Hernández despegara rumbo a Nueva York para ser juzgado allí, el Departamento de Justicia estadounidense publicó la acusación completa contra el expresidente, tres cargos que podrían desembocar en una pena máxima de cadena perpetua.

“Hernández abusó de su posición como presidente de Honduras entre 2014 y 2022 para operar el país como un narcoestado”, afirmó el fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, en una rueda de prensa en Washington.

La acusación formal, de 20 páginas, alega que Hernández formó parte de una conspiración que desde 2004 transportó más de 500 toneladas de cocaína hacia Estados Unidos a través de Honduras, procedente de Colombia, Venezuela y otros países. Como parte de esa conspiración, Hernández recibió “millones de dólares de múltiples organizaciones narcotraficantes en Honduras, México y otros lugares”, indicó la acusación.

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“Hernández usó esos beneficios del narcotráfico para enriquecerse, financiar sus campañas políticas y cometer fraude electoral, incluido en relación con las elecciones presidenciales de 2013 y 2017”, agregó.

Juan Orlando Hernández cuando iba a ser entregado ante los agentes de la DEA para su extradición.

En concreto, Estados Unidos alega que en 2013, Hernández recibió un “soborno de un millón de dólares” del narcotraficante mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán, entonces líder del cartel de Sinaloa, “a cambio de una promesa de proteger” a ese cártel en Honduras.

“Hernández ordenó entonces a sus aliados en la conspiración que viajaran a varias partes de Honduras para sobornar a funcionarios para que manipularan votos para que él se convirtiera en presidente”, aseguró en la rueda de prensa el fiscal del distrito sur de Nueva York, Damian Williams.

A raíz de sus tratos con narcotraficantes, el expresidente “corrompió las instituciones legítimas de Honduras, incluidas partes de la Policía Nacional Hondureña, las Fuerzas Armadas y el Congreso Nacional”, y convirtió su país en “uno de los mayores puntos de envío de cocaína a Estados Unidos en el mundo”, señaló el documento.

Williams alegó que, durante una reunión, Hernández declaró que quería “llenar de drogas las narices de los gringos”, y que también aceptó sobornos de narcotraficantes y “compró votos” para obtener la reelección en los polémicos comicios de 2017.

Por el primer cargo que enfrenta Hernández, el de “conspiración para importar” más de 500 toneladas de cocaína hacia Estados Unidos, la sentencia mínima es de 10 años y la máxima de cadena perpetua, si es declarado culpable.

Por el segundo, usar y poseer ametralladoras y dispositivos destructivos para apoyar la importación de cocaína, puede recibir un mínimo de 30 años y un máximo de cadena perpetua; y por el tercero, “conspirar para usar” las citadas armas, el máximo es también pasar la vida en prisión.

Será un juez federal quien determine la sentencia si Hernández es declarado culpable por un jurado, recordó el Departamento de Justicia.