Dos semanas duraron las reparaciones que se efectuaron en al menos tres fallas en la carretera que conduce hacia Copán Ruinas y de allí al punto fronterizo de El Florido, entre Honduras y Guatemala, por lo que el riesgo de quedar incomunicados continúa.
Las fallas se localizan en unos 35 kilómetros de la carretera CA-11, la cual en este momento tiene unos tres puntos críticos que son un peligro para quienes circulan por la misma.
Las lluvias, que no han parado en el occidente, han provocado derrumbes de piedras, deslizamientos de tierra y hundimientos en la referida vía, donde hay fallas geológicas que requieren tratamiento especial.
Producto de las lluvias, en el sector de Santa Rita se registró un derrumbe de enormes rocas sobre la calzada de la misma carretera, lo cual representa un gran peligro para conductores que transitan en sus vehículos por la zona.
Otro tramo dañado es el conocido como Mal Paso, localizado entre Santa Rita y Copán Ruinas, el cual fue intervenido los primeros días de septiembre, pero de nuevo presenta hundimientos que afectan el paso vehicular, sobre todo para las rastras cargadas que trasladan materia prima por la aduana El Florido provenientes de los países centroamericanos.
A inicios de septiembre, maquinaria de la Secretaría de Infraestructura y Transporte (SIT) atendió las fallas en la carretera CA-11, no obstante, la carretera de nuevo está casi intransitable.
