La tensión entre los consejeros del Consejo Nacional Electoral (CNE) se hizo evidente esta semana, luego de un intercambio público entre la presidenta del organismo, Cossette López, y el representante de Libertad y Refundación (Libre), Marlon Ochoa, durante una sesión en el Congreso Nacional.
Todo comenzó el pasado 8 de julio, cuando los tres miembros del CNE comparecieron ante el Legislativo. Durante su intervención, Ochoa lanzó un comentario que fue percibido como una insinuación directa contra López: "¿Le hace falta alguien? ¿Le hace falta alguien que está preso fuera de este país?".
López, visiblemente molesta, no tardó en responderle. Aseguró que esas palabras confirman sus sospechas sobre una campaña de desprestigio que asegura haber enfrentado el año pasado.
“Ha difamado mi nombre y ahora no me cabe duda que él estaba detrás de la campaña que me hicieron en septiembre y que está denunciada de hecho en el Conadeh y en el Alto Comisionado de las Naciones Unidas”, afirmó.
En su réplica, la consejera fue clara al decir que no extraña a nadie, pero sí lamenta la ausencia del propio Ochoa en las funciones del CNE. “Consejero, a mí no me hace falta nadie; el que me hace falta es usted. Venga a las sesiones, que para eso le pagan”, lanzó con firmeza.
La también representante del Partido Nacional en el órgano electoral cuestionó que el trabajo del pleno se ha visto interrumpido por reiteradas inasistencias, no solo de Ochoa, sino también de un suplente que recientemente ha faltado a las sesiones claves.
“Esto va mucho más allá de una medida de presión y de una votación 2-1. Creo que estamos poniendo en entredicho la democracia, y que todos están omitiendo los deberes que firmaron cuando aceptaron el cargo. Vienen, marcan presencia y luego desaparecen”, denunció.
Elecciones estancadas
López también advirtió que las ausencias y bloqueos dentro del CNE están generando un estancamiento peligroso en el desarrollo de los procesos electorales.
“No es solo el TREP; tenemos 29 procesos en total y ya habíamos lanzado cuatro. El pueblo hondureño debe saber que los ataques persisten y que hay esfuerzos para sabotear el trabajo institucional”, alertó.
Además, señaló que algunos empleados del Consejo estarían recibiendo órdenes directas para no cumplir con sus funciones.
“Tenemos un funcionario de pre-intervención de gastos que no va a participar en nada porque se lo instruyen, o una funcionaria de contrataciones que estuvo presente y no cumplió su tarea. Luego, el consejero los denuncia por no dejar que se cayera el proceso”, contó.
López concluyó lamentando que el partido Libre, que antes no contaba con representación dentro del ente electoral, hoy parece usar su espacio para “imponer caprichos” en lugar de fortalecer la institucionalidad.