La Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) fue citada por el Congreso Nacional para explicar la reciente medida que impone la validación biométrica obligatoria a toda persona que adquiera o active un chip telefónico en el país. La comparecencia está prevista para el próximo 28 de mayo.
La disposición ha generado preocupación entre ciudadanos y sectores políticos por el manejo de información personal y el posible riesgo a la privacidad.
Aunque persiste confusión entre la ciudadanía, la Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) aclaró que los hondureños tienen plazo hasta el 1 de junio de 2025 para validar o actualizar, mediante un sistema biométrico, los datos de los titulares de líneas telefónicas móviles.
Con el objetivo de fortalecer la seguridad y combatir la extorsión —un flagelo que diariamente cobra vidas y genera pérdidas económicas en el país—, Conatel ordenó a las empresas operadoras de telefonía móvil validar o actualizar los datos de sus clientes en servicios prepago y postpago. La entidad advirtió que quienes no cumplan con este proceso perderán sus números telefónicos.
La validación biométrica es un proceso de identificación y verificación de la identidad de una persona utilizando características únicas de su rostro, haciendo una validación con su DNI.
El proceso inició en 2022, pero fue hasta finales de 2024 que las operadoras comenzaron a vender chips exclusivamente con validación biométrica. “No hay un chip que se venda hoy si no es con validación biométrica. En el mes de marzo y abril, las empresas capacitaron a sus distribuidores, que andan entre 5,000 a 7,000 distribuidores actualizados”, explicó Sauceda.
El plazo para completar este procedimiento finaliza el 1 de junio. Aunque el Cohep no se pronunció formalmente, Sauceda comentó que los empresarios solicitaron mayor divulgación sobre el tema.
Se estima que hay entre ocho y nueve millones de números telefónicos activos en el país.
Conatel informó que no enviará mensajes ni hará llamadas a los ciudadanos para pedir datos personales. El proceso se gestiona directamente con la empresa telefónica correspondiente, ya sea a través de sus oficinas o de sus canales oficiales de atención al cliente.