Puerto Cortés, Honduras.
Para mediados de junio, la alcaldía de este municipio tiene planificado cerrar el paso vehicular por el puente ubicado en la aldea Baracoa sobre el río Ulúa para iniciar trabajos de reconstrucción.
El proyecto que tiene un costo aproximado a los tres millones de lempiras se encuentra en proceso de licitación; varias empresas ya presentaron ofertas para ejecutar la obra.
Dunia Zúniga, gerente técnica de la Municipalidad porteña, informó que las labores consisten en reconstruir la superficie de rodadura de la estructura que con el paso del tiempo se deterioró y se convierte en un permanente peligro para los conductores y peatones que la utilizan.
El puente lo construyó en los cincuenta la Tela Railroad Company para el paso del ferrocarril con el fin de transportar bananos al puerto. Años después lo modificaron para el tráfico de carros.
Importante vía. La estructura de Baracoa permite el tránsito vehicular entre los departamentos de Yoro, Atlántida y Cortés. Eso ayuda a acortar distancia.
Por ahí cruzan centenares de camiones cargados de palma africana y otros productos de los municipios de Tela, El Progreso y El Negrito con Puerto Cortés sin tener que pasar por San Pedro Sula y viceversa. “El proyecto ya lo socializamos con los habitantes de la zona y productores para que se programen y estén pendientes del cambio de la ruta.
Durante esté cerrado tendrán que tomar otra vía entrando por la ciudad de La Lima”, explicó.
Esta pasa por Manacalito, Nola y Las Flores al salir a La Lima.
Según datos que maneja esa oficina municipal, por la estructura pasan más de mil vehículos al día, pesados y livianos, pues es una altamente productiva.
La funcionaria dijo que los trabajos tardarán entre tres y cuatro meses, pero el cierre solo será por uno.
El año pasado, la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) ayudó en la instalación de una barrera de piedras en los cabezales de este para su protección. Carlos Menjívar, productor de palma, dijo que la obra es buena y viene a proteger la vida de los conductores y el producto que por allí salen al mercado.
Para mediados de junio, la alcaldía de este municipio tiene planificado cerrar el paso vehicular por el puente ubicado en la aldea Baracoa sobre el río Ulúa para iniciar trabajos de reconstrucción.
El proyecto que tiene un costo aproximado a los tres millones de lempiras se encuentra en proceso de licitación; varias empresas ya presentaron ofertas para ejecutar la obra.
Dunia Zúniga, gerente técnica de la Municipalidad porteña, informó que las labores consisten en reconstruir la superficie de rodadura de la estructura que con el paso del tiempo se deterioró y se convierte en un permanente peligro para los conductores y peatones que la utilizan.
El puente lo construyó en los cincuenta la Tela Railroad Company para el paso del ferrocarril con el fin de transportar bananos al puerto. Años después lo modificaron para el tráfico de carros.
Importante vía. La estructura de Baracoa permite el tránsito vehicular entre los departamentos de Yoro, Atlántida y Cortés. Eso ayuda a acortar distancia.
Por ahí cruzan centenares de camiones cargados de palma africana y otros productos de los municipios de Tela, El Progreso y El Negrito con Puerto Cortés sin tener que pasar por San Pedro Sula y viceversa. “El proyecto ya lo socializamos con los habitantes de la zona y productores para que se programen y estén pendientes del cambio de la ruta.
Durante esté cerrado tendrán que tomar otra vía entrando por la ciudad de La Lima”, explicó.
Esta pasa por Manacalito, Nola y Las Flores al salir a La Lima.
Según datos que maneja esa oficina municipal, por la estructura pasan más de mil vehículos al día, pesados y livianos, pues es una altamente productiva.
La funcionaria dijo que los trabajos tardarán entre tres y cuatro meses, pero el cierre solo será por uno.
El año pasado, la Comisión Permanente de Contingencias (Copeco) ayudó en la instalación de una barrera de piedras en los cabezales de este para su protección. Carlos Menjívar, productor de palma, dijo que la obra es buena y viene a proteger la vida de los conductores y el producto que por allí salen al mercado.