Más de L800 millones en deuda heredará próximo alcalde ceibeño

Una alcaldía altamente endeudada recibirá el próximo alcalde de La Ceiba cuando tome posesión el 25 de enero de 2022. La actual administración que dirige Jerry Sabio encontró una deuda de su antecesor Carlos Aguilar estimada en 1,239,705,284.37 lempiras.

A la fecha, la comuna ceibeña ha cancelado un total de 528,950,821.53 lempiras. El saldo actual por pagar es de 710,754,462.84 lempiras. A esto se le suma la sentencia de la Corte Suprema de Justicia, que obliga a la municipalidad a pagar una demanda interpuesta por la compañía Red Energy argumentando incumplimiento de contrato por el manejo de los desechos sólidos, por un valor de 23,000,000 de dólares (unos 543,950,000 lempiras).

Sumando ambas deudas, el alcalde que llegue administraría una suma total en cuentas por pagar de 1,254,704,462.84 lempiras. Estas deudas incluyen alrededor de 370 millones de lempiras por préstamos bancarios, 6.5 millones a la Empresa Energía Honduras (EEH), 20,000,000 al Seguro Social y 10,000,000 al Instituto de Formación Profesional (Infop), demandas interpuestas por extrabajadores, proveedores, entre otros compromisos.

En tres años y medio, la actual administración municipal ha pagado 202,000,000 de lempiras por concepto de embargos por falta de pago.

El departamento de Gerencia Municipal ha hecho esfuerzos por sanear las finanzas, tratando de recuperar la mora tributaria, que a la fecha asciende a unos 830 millones de lempiras; sin embargo, se ha fallado en esa recuperación.

“Se han honrado compromisos, pero no se puede hacer frente a tanta deuda con una baja recaudación de impuestos que hay. El 15 de enero daremos un informe general de las finanzas para que conozcan cómo se está entregando. Creemos que al próximo alcalde se le dejará una deuda de más 850 millones de lempiras’’, apuntó Saúl Salgado, gerente municipal.

El presupuesto de la municipalidad para el ejercicio fiscal 2021 es de 333,000,000 de lempiras. Según las proyecciones del departamento contable, al final de año habrá una recaudación de 290,000,000 de lempiras, generando un déficit de 43 millones de lempiras, con el que se iniciará el año 2022.

Esta severa crisis financiera que atraviesa la alcaldía ha provocado que en los últimos 8 años no se hayan ejecutado obras de gran envergadura en la ciudad.

Para Osman Suazo, del comité de transparencia municipal, “el despilfarro, la ineficiencia administrativa, por las redes de corrupción con bufete de abogados y la municipalidad, ha provocado que la alcaldía opere en números rojos’’, apuntó.

Uno de los logros de esta gestión es la firma de un convenio de pago con el Seguro Social, beneficiando a los 537 trabajadores con las atenciones, las cuales no recibían desde hace más de dos décadas por la falta de pago.