San Pedro Sula, Honduras.
Los consternados familiares de Óscar Baudel Cruz Acero, el menor hondureño de 17 años que ayer falleció en México cuando fue atropellado, solicitaron ayuda para repatriarlo, ya que son de escasos recursos.
'Quiero enterrar a mi hijo aquí. Quiero que me ayuden', expresó entre lágrimas y tristeza don Wilfredo Cruz, el humilde padre del joven.
De acuerdo a medios mexicanos, el menor era parte de la primera caravana migrante e iba caminando en el kilómetro 122 en la carretera de La Rumorosa cerca de una caseta de cobro, cuando fue embestido por un vehículo no identificado.
El padre de Cruz relató que su vástago se fue junto a una de sus hermanas mayores, la cual fue testigo del suceso, que ambos partieron rumbo a Estados Unidos en busca del sueño americano, ya que en San Lorenzo, Valle, de donde todos son originarios vivían en condiciones precarias.
LEA: Trump amenaza con cerrar frontera con México por migrantes
No especificó si su hija volverá al país tras lo acontecido o seguirá rumbo a Estados Unidos.
'Vivo en una casa de nailon y trabajó por temporadas en las cañeras, me pagan unos 4,500 lempiras al mes', dijo el angustiado señor. Otra mujer que lo acompañaba y familiar de la víctima, manifestó que la familia no tiene casa y viven en un terreno ajeno, a la orilla de la calle.
La ministra de comunicaciones, Andrea Matamoros, se puso en contacto con los familiares del hondureño y prometió ayudarles con los gastos de repatriación.Indicó que por el momento deben esperar, porque las autoridades mexicanas tienen el cadáver en el municipio de Tecate, esto debido a que realizan las investigaciones del caso, lo cual puede demorar una dos semanas el envío del cuerpo.
Apuntó que la Cancillería de la República se hará responsable de todos los gastos de repatriación.
Cruz es el cuarto hondureño en morir en el trayecto de la caravana migrante. Dos compatriotas fallecieron cuando cayeron de los diferentes vehículos que les habían dado jalón. Otro murió tras recibir el impacto de una bala de goma cuando los migrantes se enfrentaron a policías en la frontera entre Guatemala y México.
