Tegucigalpa, Honduras.
No existe ni el ambiente, mucho menos la cantidad de votos a favor requeridos (65) para que la pretensión de despenalizar el aborto sea aprobada en el Congreso Nacional.
Las bancadas del Partido Liberal y Partido Nacional, que son las fuerzas mayoritarias en la Cámara Legislativa ya divulgaron su posición de rechazo a la interrupción de embarazos a través de sus órganos de dirección partidaria.
Ambos institutos políticos contabilizan 85 votos en contra, sin contar los sufragios del Partido Anticorrupción (PAC) al igual que de Libre, donde hay posturas encontradas en este tema.
En el artículo 196 del nuevo Código Penal se contempla ahora este ilícito que estipula penas que van desde los tres hasta diez años de reclusión.
La muerte de un ser humano en cualquier momento del embarazo o durante el parto se encuentra vigente desde 1983 con la actual normativa penal, pero en el nuevo Código Penal que está en proceso de aprobación en el Congreso se incluyeron tres excepciones para que no sea catalogada como un hecho punible: el aborto terapéutico, ético o por violación.
Las iglesias Católica y Evangélica han conformado un frente común contra la despenalización del aborto en el país, posición que es compartida por la mayoría de la sociedad civil, exceptuando entidades conformadas por feministas, mujeres campesinas y miembros de la diversidad sexual.
Plantones
Ayer, desde tempranas horas, pastores y líderes de diferentes congregaciones evangélicas hicieron un plantón pacífico a inmediaciones del hemiciclo legislativo, donde elevaron plegarias y dijeron no al aborto. Los miembros de la comisión ampliada multipartidaria del Congreso que dictaminaron el nuevo Código Penal se reunieron con organizaciones que están promoviendo la admisión de causales que libren de penas a las mujeres por la comisión de este delito contra la vida.
El encuentro se extendió por varias horas, mientras que en la plaza La Merced se apostaron representantes de Somos Más, Articulación 611, organizaciones que piden que se permita el aborto.
No existe ni el ambiente, mucho menos la cantidad de votos a favor requeridos (65) para que la pretensión de despenalizar el aborto sea aprobada en el Congreso Nacional.
Las bancadas del Partido Liberal y Partido Nacional, que son las fuerzas mayoritarias en la Cámara Legislativa ya divulgaron su posición de rechazo a la interrupción de embarazos a través de sus órganos de dirección partidaria.
Ambos institutos políticos contabilizan 85 votos en contra, sin contar los sufragios del Partido Anticorrupción (PAC) al igual que de Libre, donde hay posturas encontradas en este tema.
En el artículo 196 del nuevo Código Penal se contempla ahora este ilícito que estipula penas que van desde los tres hasta diez años de reclusión.
La muerte de un ser humano en cualquier momento del embarazo o durante el parto se encuentra vigente desde 1983 con la actual normativa penal, pero en el nuevo Código Penal que está en proceso de aprobación en el Congreso se incluyeron tres excepciones para que no sea catalogada como un hecho punible: el aborto terapéutico, ético o por violación.
Las iglesias Católica y Evangélica han conformado un frente común contra la despenalización del aborto en el país, posición que es compartida por la mayoría de la sociedad civil, exceptuando entidades conformadas por feministas, mujeres campesinas y miembros de la diversidad sexual.
Plantones
Ayer, desde tempranas horas, pastores y líderes de diferentes congregaciones evangélicas hicieron un plantón pacífico a inmediaciones del hemiciclo legislativo, donde elevaron plegarias y dijeron no al aborto. Los miembros de la comisión ampliada multipartidaria del Congreso que dictaminaron el nuevo Código Penal se reunieron con organizaciones que están promoviendo la admisión de causales que libren de penas a las mujeres por la comisión de este delito contra la vida.
El encuentro se extendió por varias horas, mientras que en la plaza La Merced se apostaron representantes de Somos Más, Articulación 611, organizaciones que piden que se permita el aborto.
