Los Ángeles, Estados Unidos
Reviven el pasado
Vin Diesel vive estos días una montaña rusa de emociones que refleja en su rostro de tipo duro al que se le ablanda el gesto cuando se le felicita por su reciente paternidad y se le pierde la mirada al recordar a su amigo Paul Walker, cuya muerte precipitó el fin de la saga Fast and furious.
Absorbidos por el filme
El último capítulo de esta franquicia, Furious 7, debutó en la cartelera el jueves pasado con un sabor a despedida, un guión alterado por la fuerza de la tragedia, un final cargado de simbolismo en el que los personajes se dicen adiós y los actores hasta siempre. Diesel (47), compartió sus pensamientos con agencia Efe durante un paseo sobre el asfalto gris del aparcamiento del estadio de béisbol de los Dodgers, entre autos y remolques, en una jornada soleada y ventosa en la ciudad de Los Ángeles.
Su inconfundible voz grave y seca, un distintivo de sus personajes de acción, apenas encuentra resuello para expresar el vacío que dejará el estreno de Furious 7, un filme que mantiene muy presente la figura de Walker.
Desde que su compañero de reparto se matara en un accidente de auto por exceso de velocidad en noviembre de 2013, Diesel, estrella y productor de Fast and furious, ha estado absorbido por la película y en las últimas semanas se ha volcado en su promoción.
Ahora todo el mundo le pregunta por Paul, pero eso cambiará dentro de unos días. El lanzamiento de Furious 7 servirá, emocionalmente, para cicatrizar la herida. “Es una tortura todo lo que echamos en falta a Paul. Nos tratamos de recuperar de eso cada segundo”, comentó Diesel, quien decidió llamar Pauline a su hija nacida el 16 de marzo, fruto de su relación con la mexicana Paloma Jiménez, en honor a su difunto colega.
“Esto es especial. Estoy agradecido con el estudio por permitirnos estrenar esta película con una sensación de cierre”, explicó el intérprete, quien vuelve a encarnar al mecánico Dominic Toretto, expresidiario aficionado a las carreras callejeras.
En inicio, Furious 7 se iba a grabar simultáneamente con la octava y la novena entrega de esta franquicia, pero la prisa por llevar la séptima parte a los cines hizo que los planes se aceleraran y se descartara el rodaje múltiple.
La desaparición de Walker dejó la producción en vilo hasta que el equipo encontró una fórmula con la que se sintieron cómodos para terminar el proyecto con la ayuda de efectos visuales, imágenes inéditas del actor y la colaboración de sus hermanos, que hicieron de su doble físico para algunas tomas. Para Diesel, el final de Furious 7 es “sagrado” y “sin distracciones”. “Otros podrían haber tratado de explotar lo ocurrido. Dios bendiga al estudio por ir con la conclusión con más clase. Sin desvelar mucho lo que le ocurre a Brian (Walker), se va al cielo de la familia. Es una felicidad, hay gozo en este mundo. En nuestra saga, la paternidad auténtica es una dicha”, declaró.
Diesel insistió en el componente familiar de estas películas en que “se para la acción” (generalmente llevada a unos extremos inverosímiles) para celebrar un embarazo, un nacimiento o para reflexionar sobre lo difícil que es ser padre.
“Esto es profundo. La gente hace películas para Sundance con temas así”, dijo Diesel, que encabeza una trama movida por una venganza que amenaza con acabar con todos los protagonistas de “Fast and furious”, uno a uno.
Está convencido de que la reciente película se merece un óscar, pero está en desventaja cuando se trata de la Academia porque es una película de acción y una secuela. “¿Evito pensar en grande? No”, dijo el actor.
 En “Rápidos y furiosos 7”, Diesel interpreta al piloto de carreras callejeras Dominic Toretto, cuya familia es amenazada por el personaje de Jason Statham, quien busca vengarse de la muerte de su hermano.
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El filme cuenta con actores habituales de la franquicia que arrancó en 2001 con The fast and the furious, entre quienes están Michelle Rodríguez, Chris “Ludacris” Bridges y Dwayne Johnson, un grupo al que se sumaron esta vez Jason Statham, Ronda Rousey y el cantante Romeo Santos, entre otros.
La española Elsa Pataky regresó por tercera vez al papel de Elena, una policía cuyo paso por Furious 7 fue testimonial por las circunstancias.
“Iba a tener presencia en el tercer acto, pero después de la tragedia nos tuvimos que enfocar en responder a la historia de Brian O’Conner (Walker), así que todos los personajes tuvieron que dar un paso atrás para permitir que el espectador pudiera centrarse en el homenaje final”, relató Diesel.
 El británico Jason Statham dijo que el público se podrá identificar con que ambos hombres defienden a su familia.
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 Vin comenzó su carrera cinematográfica como director y guionista, con la influencia de Sidney Lumet. Su primer trabajo fue en 1994 con el corto “Multi-facial”, seleccionado para el prestigioso Festival de Cannes.
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