California, Estados Unidos.
Ni las numerosas polémicas en la vida personal del cantante Chris Brown, incluyendo un robo a mano armada en su casa de Los Ángeles el pasado julio mientras se encontraba fuera de la ciudad, ni la batalla legal con la madre de su hija Royalty, Nia Guzman, han rebajado un ápice su autoestima paterna, de hecho el cantante se considera un buen padre.
De este modo, Chris sigue comprometido a luchar contra las aspiraciones de Nia de restringir la custodia de su hija a solo visitas supervisadas para el cantante.
Chris tiene la intención de presentar una oposición a la solicitud de custodia completa de su ex, desestimando la alegación de que su forma de criar a la niña y su estilo de vida no son los adecuados para Royalty, según informa TMZ.
Chris asegurará que nunca ha puesto a su hija en peligro y que después de que su casa fuera asaltada ha aumentado la seguridad. El cantante también dejará muy claro que nunca ha consumido drogas cerca de su hija y que tampoco ha permitido que pandilleros pasen tiempo con la pequeña.
En una apuesta por la custodia compartida, Chris ha presentado ante el juez sus propios documentos para establecer formalmente la paternidad. Aunque todavía no hay veredicto al respecto.
