Las remesas enviadas hacia los países de ingresos bajos a medios, registradas oficialmente durante 2023, alcanzaron un monto aproximado de $656,000 millones, según informó el Banco Mundial.
En su última reseña de “Migración y Desarrollo”, el organismo multilateral señaló que la tasa de crecimiento de las remesas fue significativamente inferior al 10.8% y 8.3% registrados en 2021 y 2022, respectivamente.
No obstante, las remesas superaron a la Inversión Extranjera Directa (IED), convirtiéndolas en una fuente crucial de financiación externa para los países de ingresos bajos y medios.
También destaca que, contrario a otras regiones como Oriente Medio, el norte de África y Asia Central, que registraron caídas entre 10% y 15%, el flujo de remesas hacia América Latina y el Caribe experimentó un crecimiento del 7.7%, alcanzando los $155 mil millones.
Esto debido a los mercados laborales sólidos en las economías avanzadas, “particularmente en los Estados Unidos, que es el principal país de origen de remesas y el principal país de destino de los migrantes”, cita el escrito.
A su vez, reveló que “de cara al futuro, se espera que las remesas crezcan un 2.3% en estos países para 2024 y un 2.8% para 2025, hasta alcanzar los $690,000 millones.
El equipo de expertos, liderado por Dilip Ratha, economista principal del equipo de Migración y Remesas del Banco Mundial, subraya que, aunque las remesas superaron a la IED en algunos países, no quiere decir que estas puedan sustituirla.
Explicaron que los países en desarrollo necesitan la inversión extranjera para infraestructura crítica y promover las inversiones verdes.
Motivo por el que aconsejaron a los países que presten atención al volumen y el nivel de resiliencia de las remesas, para encontrar formas de aprovechar estos flujos para reducir la pobreza, financiar la salud, educación, promover la inclusión financiera y mejorar el acceso de las empresas a los mercados de capital.
Centroamérica
El informe también destaca que Honduras se posicionó como el séptimo país de ingresos bajos a medios que más recibió remesas en relación a su Producto Interno Bruto (PIB), puesto que las remesas representan el 26% de su PIB.
Dato que fue corroborado por el Banco Central de Honduras (BCH), al indicar que Honduras ocupa el segundo lugar de los países que más dependen de las remesas familiares en Latinoamérica.
Según informes del Banco Central, el país recibió más de $8,800 millones en remesas durante 2023, lo que representa el 25.9% de su Producto Interno Bruto.
Las remesas familiares en Honduras continúan creciendo, ya que durante el primer semestre de 2024 estas sumaron $4,628.5 millones, mostrando un aumento de $118.7 millones en comparación con los $4,509.8 millones registrados en el primer semestre de 2023.
El BCH estima que para finales de este año, las remesas familiares alcanzarán los $9,518 millones, por lo que, para alcanzar esta cifra, la entrada de remesas debe sumar $4,889.5 millones durante el segundo semestre.
Fuentes técnicas del Banco Central de Honduras, proyectan que para finales de este año se logrará alcanzar la meta, ya que “el comportamiento de las remesas está en línea con las estimaciones oficiales”.
Cabe resaltar que, según una encuesta del BCH, el 39.8% de los hondureños en el extranjero encuestados envían remesas a sus madres, siendo las principales beneficiarias, seguidas de los hermanos con un 16.9%. Mientras que Estados Unidos sigue siendo el principal país de origen de las remesas, seguido de España.