SAN PEDRO SULA, HONDURAS.- Comprar un auto eléctrico o un híbrido enchufable es una inversión cada vez más atractiva y por ello es necesario tener en cuenta los tipos de cargadores que le darán energía a tu auto.
Para empezar, es importante diferenciar las partes que los componen, pues tanto la salida de energía como el enchufe que irá al carro puede variar.
El primer punto, que tiene que ver con la energía, está dividido en tres modelos. El primero, ya en desuso, es el de Modo 1, que iba conectado directamente a los enchufes que tenemos en casa.
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Después continuó el Modo 2, que es un cable que se encuentra dividido por un regulador de voltaje, que ayudará a proteger tanto las tomas de corriente como la batería.
En tanto, el Modo 3, se ha convertido en el más común pues es el que está conectado a un Wallbox o a una estación de carga. En referencia al segundo tópico, el del enchufe, éste se puede encontrar como de Tipo 1, Tipo 2 y CCS.
El 1 fue utilizado por los primeros modelos eléctricos y se reconoce por tener una forma circular; después llegó el Tipo 2 que tiene silueta de “D” y por último el CCS, que combina dos tipos de entrada.
Este ha tomado relevancia por ser parte de las estaciones de carga rápida, ya que cuenta con una corriente continua que va directa a la batería, sin la necesidad de pasar por convertidores.
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Todos los cargadores fueron creados a partir de la suficiencia de la batería, por lo que es importante saber cuál es la capacidad de carga de la pila del auto, que oscila entre los 3,7 a los 7 kW, para elegir la salida de potencia ideal, ya que hay fabricantes de estaciones que ofrecen hasta 22 kW, algo que, por ahora, sirve de poco.
