A la justicia divina deja el papá de Keiry Gricel García (14 años), el proceso penal que se le sigue al supuesto homicida de su hija.Y es que a casi una semana del lamentable asesinato de la jovencita, quien en junio cumpliría 15 años, agentes de la Dirección Policial de Investigación (DPI) capturaron el miércoles a Bryan Josué Pineda Enamorado (de 30 años), por suponerlo responsable de la muerte de la niña.
Jayro García, progenitor de Keiry, en una breve entrevista con LA PRENSA, dijo estar devastado junto al resto de su familia; sin embargo, refirió que deja todo en manos de Dios.
“Creo que Dios se encargará de eso, yo no juzgo al muchacho, que se haga la voluntad de Dios, porque él es quien da los hijos y él los quita. Solo Dios sabrá el propósito que tiene”, declaró García.
Agregó que la aprehensión del supuesto homicida de su pequeña no le alegra ni le entristece, pues su captura no le devolverá a su hija, ni mucho menos terminará con el sufrimiento que con su familia están pasando.Puntualizó que este es un capítulo que por ahora prefiere cerrar, por lo que no volverá a dar declaraciones al respecto.
Investigación
Elvis Guzmán, portavoz del Ministerio Público, informó que la Fiscalía Especial contra la Vida, después de hacer los análisis correspondientes, concluyeron que existen indicios suficientes para creer que Pineda Enamorado pudo haber disparado contra la humanidad de Keiry, la cual murió casi de inmediato luego de recibir un disparo en el cuello a las afueras del estadio Olímpico el pasado 2 de febrero, día en que se desarrollaba un encuentro entre Marathón y el Real España.
“El mismo Código establece que al más mínimo indicio se puede dictar un auto de prisión, y en este caso los indicios son pruebas testificales que ubican al ahora sospechoso en la escena y crimen y como la persona que disparó contra la vida de la persona”, puntualizó Guzmán.El juez fijó para el próximo lunes 13 de febrero la audiencia inicial en el juicio contra Pineda Enamorado.
En tanto, familiares del acusado difundieron un video en redes sociales para desvirtuar la participación del joven en el asesinato, afirmando que este se encontraba comiendo en una glorieta de la colonia Satélite, sector donde reside, al momento en que ocurrieron los hechos en el Olímpico.El juez envió a Bryan Josué Pineda al penal de El Progreso.