San Pedro Sula. El reloj marcaba las 9:00 am cuando Israel Romero Guevara (36) hacía su habitual recorrido en un centro comercial ubicado en la segunda calle, 18 avenida del barrio Río de Piedras, donde laboraba como guardia de seguridad.
El celador saludó a un propietario de un negocio cuando este se disponía a abrir su local.
A los pocos minutos, tres hombres en una camioneta Ford Explorer, gris, con placas PBV 9670 llegaron al centro comercial y dos de ellos se dirigieron a la puerta del negocio cuyo propietario acababa de ingresar, mientras el que conducía los esperaba en el carro.
Al observar que los dos hombres portaban armas en las manos, el celador sacó su pistola nueve milímetros e hizo disparos al aire para intentar a alejar a los sospechosos.
Los hombres comenzaron a disparar contra el guardia, este intentó refugiarse en una de las columnas del edificio y también repelió el ataque.
Los malvivientes abordaron de nuevo el carro y siguieron disparando contra el celador, quien logró hacer varios disparos contra las llantas y ventanas de la camioneta. Sin embargo, las balas también alcanzaron a Romero Guevara que cayó herido frente al local que habían intentado ingresar los antisociales y minutos después murió.
Los propietarios de los negocios del centro comercial avisaron del hecho a la Policía Nacional y a los pocos minutos varias patrullas llegaban a la zona.
Abandonan camioneta
Agentes policiales se desplazaron por la zona en busca de pistas de los sospechosos y fue cuando encontraron abandonada la camioneta en que se conducían los criminales.
La Ford Explorer fue dejada entre la 10 y 11 calles, 24 avenida de la colonia Trejo que colinda con Río de Piedras. El vehículo presentaba varios balazos en las llantas y en los vidrios. La ventanillas del conductor estaba quebrada.
El carro fue revisado por agentes de Inspecciones Oculares de la Dirección Nacional de Investigación Criminal (DNIC), estos informaron que no encontraron rastros de sangre, por lo que se presume que ninguno de los delincuentes habría resultado herido.
Autoridades informaron que la camioneta portaba placas que pertenecen a un turismo y que tienen varias denuncias de que ese carro era usado por delincuentes para cometer robos y secuestros, entre otros delitos.
Al lugar llegó la esposa del infortunado guardia, quien lo recordó como un hombre responsable. La víctima residía en Cofradía y era padre de cuatro hijos. Romero Guevara formó parte del Ejército hondureño y desde hace seis años laboraba como guardia de seguridad en el edificio adonde fue ultimado. La Policía informó que tiene pistas de los autores de este nuevo hecho criminal.
