16/04/2024
12:06 AM

Motoristas de buses de la Quezada suspenden servicio por temor

  • 13 marzo 2020 /

Presienten ataque de la pandilla a la que pertenece el sicario que quemaron vivo el jueves.

    Comayaguela.

    Desolada se vio ayer la calle principal de la colonia Arturo Quezada, de Comayagüela, después del doble crimen ocurrido la mañana del jueves en la terminal de buses urbanos rapiditos.

    La zona comercial, caracterizada por el ajetreo de vendedores, compradores y el molote causado por las unidades del transporte público, se vio vacía ante su ausencia, ya que ayer no prestaron el servicio.

    La ausencia se debió por el temor a represalias de la pandilla a la que pertenecía Brandon Stuart Lezama Sánchez (de 18 años), quien fue quemado vivo por los mismos operarios de autobuses en venganza porque este le quitó la vida al motorista Howard Bonifacio Merlo Flores.

    Los pobladores de las colonias Arturo Quezada, Australia, Nueva Galilea, entre otras, tuvieron que utilizar otros medios alternativos de transporte, como mototaxis, para abordar buses de otras rutas que los llevaran a sus destinos, principalmente al centro de la ciudad.

    Muchas personas se vieron caminando por la calle del comercio de la Arturo Quezada, hasta el anillo periférico, para llegar a la terminal de buses de la ruta San Francisco-Centro, una de las opciones para salir de ese sector de la capital.

    “No hay buses y no sabemos hasta cuándo funcionarán otra vez”, dijo una de las mujeres que con paraguas en mano caminaba para tomar un transporte en otro sitio.

    Los propietarios de pulperías y pequeños negocios de venta de golosinas, aprovecharon la mañana para borrar las huellas de la sangre dejada producto de las dos muertes violentas ocurridas el jueves en cuestión de minutos, en la Arturo Quezada.

    Con baldes de agua y con escobas, poco a poco fueron removiendo la sangre que quedó regada varios metros a la redonda de donde fue atacado Howard Merlo.

    Ayer se pudo observar cómo muchos jóvenes, motoristas de mototaxis, contemplaban en sus celulares las violentas imágenes que dejó la golpiza y posterior muerte de Brandon Stuart, el homicida in fraganti del conductor de la unidad 102 de la ruta Quezada-Centro.

    Sin que las autoridades de investigación se pronunciaran ante los hechos y debido a la dinámica del primer crimen, hace presumir que la muerte de Merlo fue un ataque ordenado por alguna pandilla.