San Pedro Sula, Honduras.
Mario Orellana Barahona, quien tenía siete años de trabajar en una minera de El Mochito, Santa Bárbara, murió el caer en un agujero y quedar soterrado por dos horas.
Familiares reclamaron el cuerpo ayer en la morgue de Medicina Forense y relataron que el hecho ocurrió la mañana del sábado cuando Orellana Barahona estaba en sus labores.
Indicaron que la víctima estaba trabajando desde temprano con otro de sus compañeros en un área de la mina cuando de repente “se aflojó el terreno” y cayó en un agujero.
Un primo de Mario Orellana Barahona dijo que el hoyo era de al menos 10 metros, por lo que dieron la alerta para ayudarlo de inmediato, pero quedó soterrado y eso impidió rescatarlo a tiempo.
El hecho sucedió a eso de 9:30 am y, según los parientes, lograron sacar a Orellana como a eso de las 11:30 am, por lo que ya no pudieron hacer nada. El cuerpo fue traído en una ambulancia a San Pedro Sula para la autopsia.
Luto
Los parientes retiraron ayer en horas de la mañana el cadáver del minero para llevarlo y enterrarlo en El Mochito, donde residía con sus familiares.
Hijas de la víctima ayer lloraban en las afueras de la morgue de San Pedro Sula lamentando el accidente que le había ocurrido a su padre.
“Quiero ver a mi padre vivo, devuélvanmelo”, eran las súplicas que hacía una de las hijas del minero al salir de la morgue.
Mario Orellana Barahona, quien tenía siete años de trabajar en una minera de El Mochito, Santa Bárbara, murió el caer en un agujero y quedar soterrado por dos horas.
Familiares reclamaron el cuerpo ayer en la morgue de Medicina Forense y relataron que el hecho ocurrió la mañana del sábado cuando Orellana Barahona estaba en sus labores.
Indicaron que la víctima estaba trabajando desde temprano con otro de sus compañeros en un área de la mina cuando de repente “se aflojó el terreno” y cayó en un agujero.
Un primo de Mario Orellana Barahona dijo que el hoyo era de al menos 10 metros, por lo que dieron la alerta para ayudarlo de inmediato, pero quedó soterrado y eso impidió rescatarlo a tiempo.
El hecho sucedió a eso de 9:30 am y, según los parientes, lograron sacar a Orellana como a eso de las 11:30 am, por lo que ya no pudieron hacer nada. El cuerpo fue traído en una ambulancia a San Pedro Sula para la autopsia.
Luto
Los parientes retiraron ayer en horas de la mañana el cadáver del minero para llevarlo y enterrarlo en El Mochito, donde residía con sus familiares.
Hijas de la víctima ayer lloraban en las afueras de la morgue de San Pedro Sula lamentando el accidente que le había ocurrido a su padre.
“Quiero ver a mi padre vivo, devuélvanmelo”, eran las súplicas que hacía una de las hijas del minero al salir de la morgue.
