La principal hipótesis que manejan las autoridades de la Policía es que el crimen de Javier Hernández, expresidente del equipo de fútbol Atlético Choloma, tiene como posible motivación el reclamo de unas tierras al cartel de los Cachiros.
Hernández, de 58 años, fue ultimado en los predios de una gasolinera de la comunidad de Cuyamel, municipio de Omoa, Cortés, en el hecho también murió una mujer de nombre Joselin Mata, que estaba departiendo con el exdirigente deportivo.
En el informe proporcionado por las autoridades se establece que, según versión de familiares de Hernández, a eso de las 10:20 de la noche del sábado él se encontraba departiendo con unos amigos en la gasolinera y llegaron unos individuos en una camioneta negra y tras bajarse empezaron a dispararles.
En el acto murió Hernández y Joselin Mata quedó herida y la trasladaron a un centro asistencial donde murió. Las averiguaciones de la Policía indican que Hernández hace varios días había venido deportado de Estados Unidos.
Crimen de su socio
La Policía informó que Javier Hernández fue procesado en el Juzgado de Letras con competencia territorial nacional en materia penal por suponerlo responsable de la comisión del delito de testaferrato en perjuicio de la economía del Estado de Honduras, según número de expediente 09-2018.
Hernández también fue detenido en 2015 por la Policía con 14 mil dólares en Corinto, Omoa. En aquel momento no se le acusó de ningún cargo y las autoridades informaron que fue detenido para efectos de investigación.
Luego de haber justificado el dinero logró salir en libertad.
Además, siempre tuvo una relación cercana con personajes de la política hondureña que han sido mencionados en diferentes juicios por narcotráfico en Estados Unidos, entre ellos el exdiputado Óscar Nájera.
La Policía informó que Javier Hernández hace varios días había venido deportado de Estados Unidos.
Javier Hernández, conocido como Chicharito, fungió como cónsul general de Honduras en Nueva York, Estados Unidos, de 2007 a 2008.
Cabe recordar que fue el narco hondureño Devis Leonel Maradiaga, jefe del cartel de los Cachiros, quien confirmó durante su testimonio en el juicio contra Fabio Lobo -hijo del expresidente Porfirio Lobo- en Nueva York que había mandado a matar al socio de Hernández, Melvin Sanders, en 2013.
Sanders también fue presidente del Atlético Choloma.