Una anciana murió de infarto fulminante durante la noche de ayer viernes en el barrio Morazán de Tegucigalpa, capital de Honduras, luego de que policías detuvieran a su nieto por incumplir una señal de tránsito.
Se trata de la señora María Petrona Ramírez, de 79 años, quien falleció en el momento que elementos policiales arrestaron a su nieto, que manejaba en presunto estado de ebriedad y, según las autoridades, se pasó un semáforo en rojo.
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La nieta de la fallecida afirmó que el detenido sí se cruzó el semáforo en rojo y que manejaba bajo los efectos del alcohol, pero que no se justificaba que los agentes lo golpearan al momento del arresto.
“Lo justo era que los policías lo detuvieran, pero comenzaron a golpearlo. Entonces, mi abuela observó todo y no resistió, ellos la mataron”, manifestó la familiar con voz de impotencia, en declaraciones a TN5.
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El cadáver de la septuagenaria fue trasladado a las instalaciones de Medicina Forense, en donde se le practicará la autopsia correspondiente, para determinar, de forma oficial, la causa de su muerte.
Finalmente, familiares de la Petrona Ramírez exigieron justicia ante la violencia desmedida con la que actúan algunos funcionarios policiales al momento de detener a ciudadanos. “No es justo que los policías entren y que agarren a golpes a todo el mundo”, cuestionó la nieta de la anciana.
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