El Tribunal de Sentencia declaró culpable al exjuez hondureño Bernardino Rodríguez Mejía por el delito de abuso de autoridad por haber dejado en libertad a un ciudadano de origen guatemalteco, a su esposa y a un hondureño en la audiencia preliminar.
En esa ocasión, Rodríguez Mejía dio sobreseimiento provisional a favor del guatemalteco Osmán Antonio Meza, a su esposa Dina Cifuentes y del hondureño Roger Alfonso Castro, acusados por el supuesto delito de lavado de activos a pesar de que el Ministerio Público presentó las pruebas suficientes, como documentación y también la declaración de testigos protegidos, para que el caso fuera elevado a juicio oral y público.
Según las autoridades, el juez en esa ocasión los dejó libre al considerar que no existía méritos del delito de lavado de activos. Solamente valoró las pruebas presentadas por la defensa. Al parecer a estas personas les había encontrado más de 300 millones de lempiras en ganado, supuestamente producto del narcotráfico.
En el momento cuando los acusados salían del centro penal, la Fiscalía solicitó al Juzgado emitir una orden de captura, la cual se hizo efectiva por los delitos vinculados al tráfico de armas.
Indicios
Aún cuando fungía como juez, la Fiscalía presentó antejuicio y luego fue despedido y acusado.
'Se abrió investigación contra el juez Rodríguez por haber dejado en libertad a los dos implicados en actividades ligadas al narcotráfico y porque no valoró las pruebas que presentó la Fiscalía', dijeron las autoridades en esa ocasión.
El caso tardó más de seis años porque el imputado presentó recursos durate el proceso.
La pena que podría recibir es de tres años a seis años por el delito de abuso de autoridad. Durante el proceso el exjuez se defendió en libertad. El juicio fue desarrollado en el Tribunal de Sentencia de Santa Bárbara en el occidente de Honduras.