22/04/2024
12:46 AM

El 19 de enero darán resolución de medios probatorios contra policías que habrían desviado investigación de caso Berta Cáceres

La ambientalista Berta Cáceres fue asesinada el 3 de marzo de 2016 dentro de su casa en La Esperanza.

Tegucigalpa, Honduras.

La Fiscalía Especial para el Enjuiciamiento de Funcionarios y Servidores del Sector Justicia se pronunciará el próximo 19 de enero en torno a la cantidad de medios de prueba que serán admitidos por un tribunal de sentencia en contra de un policía activo y un exmiembro del cuerpo policial, quienes en un inicio fueron asignados a la investigación del crimen de la ambientalista Berta Cáceres y trataron de adulterar el curso de las circunstancias que rodearon el hecho.

En las últimas horas se terminó de evacuar la audiencia de proposición de medios de prueba en contra del agente de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI), Juan Carlos Cruz, y del expolicía Miguel Arcángel Rosales Izcano, acusados por los delitos de inutilización de registros destinados a servir como medio de prueba ante autoridad competente y falsificación de documentos públicos.

A estos imputados, según el Ministerio Público, “erróneamente se les había favorecido en junio de 2021 declarándoseles nulas sus causas con la entrada en vigencia del nuevo Código Penal, sin embargo, recientemente la Corte de Apelaciones revocó el sobreseimiento definitivo y ordenó continuar con el proceso penal”.

Este caso está relacionado con las primeras pesquisas del asesinato de Cáceres, que fueron asignadas a los procesados y que al final resultaron falsas. De acuerdo con la investigación, ambos funcionarios fabricaron pruebas, siendo una de ellas la declaración de un supuesto testigo protegido y otra era una grabación que habría sido adulterada.

Ambos enfrentan nuevamente a la justicia por presuntamente cambiar la dinámica de investigación en este caso.

Luego del crimen de Cáceres el 3 de marzo de 2016, se mencionó que el móvil estaba vinculado al robo, sin embargo, la investigación realizada por la Agencia Técnica de Investigación Criminal (Atic) descartó ese extremo cuando el 2 de mayo de ese mismo año ejecutó la Operación Jaguar en la cual se efectuaron las primeras capturas, entre ellos la del gerente de la empresa Desarrollo Energéticos SA (Desa), compañía a la cual se enfrentó Cáceres en defensa del río Gualcarque, donde se pretendía construir una represa.

La investigación de Atic fue sustentada a través de prueba técnica- científica al realizar los análisis y pericias respectivas a la arma con la cual se supone le quitaron la vida a la líder ambientalista, así como las relacionadas a la interceptación a comunicaciones con control jurisdiccional.

Hasta la fecha se reporta la condena de ocho personas implicadas en el asesinato de la ambientalista, la última fue contra el presidente ejecutivo de Desa, Roberto David Castillo Mejía, considerado autor intelectual del crimen.