La Policía Nacional, a través de la División de Seguridad del Transporte Urbano (DSTU-SPS) y bajo la coordinación de la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra el Crimen Organizado (DIPAMPCO), ha reforzado los operativos de seguridad en la Gran Terminal Metropolitana y en distintas paradas de buses de San Pedro Sula.
El objetivo principal es la prevención, disuasión y control de actividades delictivas, especialmente aquellas vinculadas con la extorsión en el transporte urbano, uno de los delitos que más afecta a conductores y pasajeros en la zona norte del país.
Los agentes realizan registros personales y de equipajes a los viajeros que se desplazan hacia diferentes puntos del país. Asimismo, verifican documentos de identidad y cotejan la información con el Sistema Nacional de Registros de Casos de Investigación (NACMIS), con el fin de identificar a personas que puedan tener órdenes de captura pendientes.
Noel Pérez, vocero regional de la Policía Nacional, manifestó que los controles no se limitan a la Gran Terminal Metropolitana. “Los registros se han extendido a múltiples paradas de buses ubicadas sobre los bulevares del norte y del sur de la ciudad, con el fin de fortalecer la seguridad en puntos de alta circulación”.
Los operativos tienen como finalidad prevenir delitos como robos, asaltos y extorsiones, y brindar confianza a quienes utilizan el transporte público a diario.
“Estos controles nos dan tranquilidad, porque sabemos que hay vigilancia y que la Policía está pendiente de nosotros”, comentó Luis Álvarez, un conductor de la ruta San Pedro Sula–Choloma.
Por su parte, María Rodríguez, usuaria frecuente de la terminal, expresó: “Viajo cada semana a Santa Bárbara y siempre me preocupa la seguridad. Me parece bien que revisen a las personas, así uno viaja con más confianza”.
Con estas acciones permanentes, la Policía Nacional mantiene el compromiso de mantener la seguridad ciudadana. Las autoridades recordaron que estos operativos forman parte de una estrategia integral para combatir la criminalidad y garantizar que los hondureños puedan trasladarse con mayor protección y confianza en el transporte urbano y de larga distancia.