Las celebraciones navideñas dejaron al menos 17 personas heridas por el uso de pólvora en San Pedro Sula, según confirmaron autoridades del hospital Mario Catarino Rivas, principal centro asistencial de la ciudad.
En las últimas horas, tres nuevos pacientes ingresaron a emergencia con quemaduras provocadas por artefactos pirotécnicos, lo que incrementó la cifra de lesionados registrada durante la noche del 24 y el transcurso del 25 de diciembre.
El reporte médico detalla que entre los afectados más recientes se encuentran dos menores de edad y un adulto, quienes requirieron atención inmediata debido a la gravedad de las lesiones.
Uno de los niños sufrió quemaduras en el rostro, mientras que el segundo presenta daños en los ojos, producto de la manipulación directa de pólvora durante las celebraciones.
En el caso del adulto, el estallido del artefacto provocó la pérdida parcial de un dedo, lesión que obligó a su ingreso para tratamiento especializado.
Las autoridades sanitarias indicaron que la mayoría de los pacientes han sido atendidos tanto en el hospital Mario Catarino Rivas como en el Instituto Hondureño de Seguridad Social (IHSS), donde permanecen bajo observación médica.
El consolidado de los casos fue actualizado hasta las 9:00 de la noche del jueves 25 de diciembre; no obstante, los médicos advirtieron que la cifra podría aumentar con nuevos ingresos registrados durante la madrugada o primeras horas de este viernes.
Ante la recurrencia de este tipo de incidentes, personal de salud reiteró el llamado a la ciudadanía para extremar las precauciones durante el uso de juegos pirotécnicos.
De manera especial, se pidió a padres y responsables de menores evitar que niños y adolescentes tengan contacto directo con pólvora, especialmente sin la supervisión de un adulto.
Las autoridades recordaron que estos accidentes suelen ser prevenibles y que cada año dejan secuelas físicas, en algunos casos permanentes, principalmente en menores de edad.
Además, reiteraron que optar por celebraciones responsables puede evitar tragedias y reducir la carga en los centros hospitalarios durante las festividades de fin de año.